La ciudadanía llora con la Familia Real por la muerte del Príncipe Enrique, y entre las condolencias ha habido incluso sorpresas.
La Familia Real ha comenzado los actos con lo que despedirá al Príncipe Enrique, fallecido el pasado 13 de febrero en el Palacio de Fredensborg, lugar al que había sido trasladado desde el Rigshospitalet de Copenhague cuando ya nada se podía hacer por su vida. Consciente de que sus dolencias iban a terminar con él, tomó la decisión de morir en este recinto palaciego en el que fue feliz.
Después de que se lanzaran unas salvas en su honor, el cuerpo sin vida de Enrique de Dinamarca fue trasladado desde el Palacio de Fredensborg al Palacio de Amalienborg, un trayecto de 40 kilómetros que fue recorrido en una hora. Todos los miembros de la Familia Real participaron en un cortejo fúnebre que abrió la Reina Margarita, y al que siguieron los coches del Príncipe Federico y la Princesa Mary con sus hijos, y cerró el Príncipe Joaquín con su familia.Por el camino, algunos ciudadanos han presentado sus respetos al paso del cortejo. Al llegar al recinto palaciego en Copenhague, los miembros de la Casa Real han paseado por la explanada de Amalienborg, donde han podido ver los miles de ramos de flores colocados espontáneamente por la ciudadanía. Se ha podido ver además algo curioso, ya que en una postal colocada dentro de una corona se veía RIP Kong Henrik, traducido como DEP Rey Enrique. Así, alguien le ha dado tratamiento de Rey, algo que la Reina Margarita nunca le concedió y que le llenó de rabia y dolor durante toda su vida.
De hecho, los funerales en su honor van a estar marcados por su enfado eterno por no haber sido nombrado Rey consorte, lo que debería corresponderle como esposo de la Reina de Dinamarca. Tenía derecho a ser enterrado en el mausoleo real de la catedral de Roskilde, en un sarcófago en el que descansaría para siempre con la Reina, sin embargo se negó al considerar que no tiene rango suficiente. Tampoco quiere un funeral de Estado.Por ello, los actos serán los siguientes: El viernes 16 a las 18:00 horas, los restos mortales del Príncipe Enrique se colocarán en la Iglesia del Castillo de Christiansborg, donde desde el sábado al lunes podrá ser visitado por aquellos ciudadanos que quieran despedirse de él. El martes 20 de febrero a las 11:00 horas tendrá lugar un funeral en recuerdo al Príncipe Enrique en la Iglesia del Palacio de Christiansborg a la que asistirán familiares y amigos. Además, será incinerado y sus cenizas se repartirán entre el mar y los jardines privados de Fredensborg.