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El Príncipe Andrés de Inglaterra por fin se dio cuenta de la gravedad de su situación y contrató a un nuevo abogado, Andrew Bettler. Ha sido él quien ha conseguido que el juicio se retrase al considerar que su defendido no fue bien informado del procedimiento, ya que se encontraba en Balmoral, y no fue notificado oficialmente de que iba a ser juzgado.
El Príncipe Andrés acude a una misa en memoria del Duque de EdimburgoAdemás, según Andrew Bettler, en 2009, Virginia Giuffre habría firmado un acuerdo secreto con Jeffrey Epstein en el que su cliente quedaría protegido ante cualquier ataque: "Ha habido un acuerdo de conciliación que la demandante ha celebrado en una acción previa que libera al Duque y a otros de cualquier responsabilidad potencial".
Pero la abogada de ella, Lisa Bloom, ha conseguido, mediante una orden internacional, que el Tribunal Superior de Londres informe al Príncipe Andrés, por lo que todo seguirá según lo previsto. La próxima vista por tanto tendrá lugar en octubre de 2021, y allí el hijo de la Reina Isabel se tendrá que defender por primera vez de las acusaciones de Virginia Giuffre.
El Príncipe Andrés en Royal Portrush Golf ClubAnte todo este ir y venir, el juez del caso, Lewis Kaplan, se ha enfadado con lo sucedido. Cree que únicamente el caso se está retrasando, con el dinero que conlleva el aplazamiento. Según Kaplan, simplemente se están fijando en temas administrativos y no en el caso en sí: "Lo estamos haciendo más complicado de lo que realmente es, eliminemos todos los detalles técnicos y vayamos al fondo de la cuestión".
Virginia Giuffre demandó al Duque de York por presuntamente haber mantenido relaciones con ella cuando era menor. Todo ello además relacionado con el trafico de menores de Jeffrey Epstein, del que se sabe que guardaba una gran relación de amistad con el propio Príncipe Andrés. Además, ella tiene una foto con el Príncipe Andrés, lo que hace que se le relacione con él, sin embargo, el hijo de la Reina Isabel niega incluso que se hayan conocido.
La razón por la que se juzga 20 años después
Parece extraño que en su momento no ocurriera nada pero ahora este caso se lleve a juicio. Todo se debe a la Ley de Víctimas Infantiles de Nueva York, cambiada en 2021, por lo que los delitos de esta índole no prescribirán. Es por ello que el Príncipe Andrés debe enfrentarse a la justicia, dando igual su posición o cargo, tal como expresa el documento legal de la denuncia: " En este país ninguna persona, ya sea presidente o príncipe, está por encima de la ley, y ninguna persona, por vulnerable sea, puede ser privada de la protección de la ley. Hace veinte años, la riqueza, el poder, la posición y las conexiones del Príncipe Andrés le permitieron abusar de una niña asustada y vulnerable sin nadie que la protegiera. Ha llegado el momento de que alguien le pida cuentas".
