La Reina Silvia contó con la presencia de Sofia Hellqvist, que está siguiendo los pasos de su suegra en este campo, así como de la Reina Sofía y de la Princesa Hisako Takamado de Japón. Doña Sofía ya había estado dos años antes en este foro, aunque para la princesa nipona era la primera vez.
No ocurrió lo mismo entre las dos Sofías. La Reina Sofía y Sofia Hellqvist no mostraron demasiada complicidad, aunque lo cierto es que aunque sí se conocen, no tienen una relación ni estrecha, ni cercana.
La Reina Sofía trabaja desde la fundación que lleva su nombre para mejorar la vida de las personas con Alzheimer y sus familias. Por eso fue invitada al congreso y además, la directora general de la Asociación Alzheimer's Disease International entregó a Doña Sofía de las credenciales de embajadora de esta entidad, lo que le llenó de orgullo.
Por la tarde, la Reina Silvia invitó a una cena a sus invitadas extranjeras a la que ya no se unió la Princesa Sofia, que se quedó en su residencia de Villa Solbacken con el Príncipe Carlos Felipe y sus hijos Alejandro y Gabriel. Así, Silvia de Suecia quiso agasajar a la Reina Sofía y a la Princesa Takamado de Japón.
Victoria de Suecia invita a comer a la Reina Sofía
Pero aún quedaba más, ya que al día siguiente las llevó a conocer el Parque de Haga, concretamente el Pabellón de Gustavo III. Allí, las dos royals recibieron las explicaciones de Jonas Wallin, que ejerció de guía, y quedaron maravilladas por el arte que esconde el recinto palaciego.
Para finalizar su agradable estancia en el país escandinavo, se acercaron al Palacio de Haga, residencia oficial de Victoria y Daniel de Suecia, donde les esperaba en la puerta la Heredera. La Princesa Victoria hizo la reverencia a la Reina Sofía y se fotografió junto a su madre y las dos royals extranjeras justo antes de que tuviera lugar el almuerzo privado. Para la Reina Sofía ha sido un viaje perfecto.