En este acto, el más importante de su carrera militar, la Dama Cadete Borbón Ortiz, al igual que el resto de cadetes, ratifica su compromiso de cumplir con sus obligaciones militares hacia la defensa de España y de su ordenamiento constitucional.
Si bien esta cita es religiosa, es habitual que la mayor parte de los cadetes de la Academia General Militar, sean de la confesión que sean, o de ninguna, acudan a esta ofrenda a la Pilarica, que luce para la ocasión el mando que donó la Academia General Militar.
En la Plaza del Pilar se ha podido ver la formación del Batallón de alumnos, tras lo que los cadetes que han acudido han pedido la protección a la Virgen del Pilar. Una representante realizó unas palabras de ofrecimiento y se depositó una ofrenda floral a la Pilarica. Posteriormente, los cadetes, entre ellos la Princesa de Asturias, han ido pasando ante la Virgen, a la que han saludado inclinando la cabeza y han realizado su petición en el instante que tenían ante ella. Ha sido el momento más emotivo de esta ceremonia en la que ha participado la Princesa Leonor, que ha vivido esta cita como una cadete más.
Con boina, moño y uniforme militar
Durante este acto se ha visto a la heredera con el traje militar que llevó en la ceremonia de Entrega de Sables, es decir, una camisa beige con pantalón verde oscuro. Portaba la boina grancé que le acredita como combatiente del Ejército de Tierra, así como los cordones rojos de cadete.
Se pudo ver que la Princesa de Asturias llevaba el pelo recogido en un moño, que se puso unos sencillos pendientes y que en algún momento se tuvo que colocar mejor la gorra. Además, realizó el saludo militar y bromeó con sus compañeros y compañeras de la Academia General Militar, donde se encuentra muy integrada. Finalizado este acto, toca la Jura de Bandera, un momento trascendental en su formación militar en el que está acompañada de los Reyes Felipe y Letizia.