La Familia Real Británica tiene ciertos sobrenombres con el que se llaman los unos a los otros, como puede pasar en otras muchas familias. La Reina Isabel es llamada Gan-Gan por algunos de sus bisnietos, mismo apelativo con el que sus nietos y bisnietos se referían a Victoria Eugenia de Battenberg, princesa británica de cuna y Reina de España por matrimonio. En el caso del Príncipe Guillermo no llama a la Reina Isabel Gan-Gan, pero sí se refiere a ella de forma cariñosa.
Aunque se encontraba en público, el Duque de Cambridge quiso despedirse de la Monarca con todo el cariño. No podía abrazarla ni darle un beso, y no porque el protocolo lo prohíba, sino la pandemia, que ha provocado que la Reina Isabel solo rompa el distanciamiento físico con el Duque de Edimburgo, con el que se confinó en marzo de 2020. Así, al decirle adiós señaló: " Bye, Gran ", lo que se puede traducir como 'Adiós, abu", una forma muy cariñosa y alejada del "Your Majesty" que habrá tenido que emplear en momentos más formales.
La Reina Isabel mostró una sonrisa al escuchar las palabras de su nieto, aunque quizás detrás de su cara de felicidad había cierta tristeza al no poder pasar más tiempo con su familia. Además, esta Navidad no será como las anteriores, donde la Familia Real Británica se reúne en Sandringham para celebrar las fiestas. Teniendo en cuenta las recomendaciones, la Reina Isabel y el Duque de Edimburgo han optado por celebrar la Navidad en Windsor Castle los dos solos, dando libertad a sus hijos y nietos para pasar esos días con otros familiares, si es que así lo desean.
Es tradición que los miembros de la dinastía se reúnan en Norfolk para una Navidad en la que se da prioridad a la Monarca y el Príncipe Felipe. Cuando hay ausencias, suelen tomarse incluso como desaire, a pesar de que si alguien falta se lo ha comunicado previamente a la Reina Isabel, que entiende que sus hijos y nietos tienen también otros compromisos. En este 2020 les ha hecho saber que no tienen que sentirse mal por no pasar las fiestas con ella y con el Duque de Edimburgo y que organicen sus planes con total libertad, siempre teniendo en cuenta las restricciones.
En ese sentido, el Príncipe Guillermo y Kate Middleton han confesado que no tienen muy claro qué van a hacer en Navidad. Lo más lógico es que pasen las fiestas en Anmer Hall, su casa de campo en Norfolk, o que se desplacen a Buckeberry Manor, residencia de la familia Middleton para estar con la familia de la Duquesa de Cambridge.
Sea debido a que no lo tienen claro o para no confirmar públicamente sus planes, durante su visita a Cardiff dentro de su Royal Train Tour le dijeron a una estudiante llamada Lily Faulkner que no saben qué hacer en Navidad: "Es difícil, todavía estamos tratando de hacer planes ", habría señalado el Príncipe Guillermo. Lo que está claro es que pasarán las fiestas al menos con sus tres hijos, el Príncipe Jorge, la Princesa Carlota y el Príncipe Luis.
Royal Train Tour
Tanto el encuentro con la Reina Isabel como la visita a Gales forman parte del Royal Train Tour realizado por los Duques de Cambridge. El Príncipe Guillermo y Kate Middleton se embarcaron por primera vez en el tren que está a disposición de la Reina Isabel para realizar un viaje de dos días por distintos puntos de Inglaterra, Escocia y Gales que les llevó a recorrer unos 2000 kilómetros. El objetivo fue homenajear el trabajo de personas y organizaciones que han ayudado a sobrellevar unos meses tan duros debido a la pandemia. Con este viaje han buscado también ofrecer esperanza y optimismo en un momento tan complicado para todo el mundo.
El Príncipe Guillermo y Kate Middleton cogieron el tren real en la estación londinense de Euston en la noche del domingo 6 de diciembre de 2020. Al día siguiente su primera parada fue Edimburgo. Posteriormente visitaron a los trabajadores del Scottish Ambulance Service de Newbridge. La visita siguió en Brentwood-upon-Tweed para reunirse con estudiantes y profesores de Holy Trinity Church of England First School. Tras su paso por Batley conocieron la labor del banco de alimentos de Manchester, acto con el que cerraron el día.
El martes 8 de diciembre de 2020 iniciaron la jornada en Cardiff, capital de Gales, donde se reunieron con universitarios para hablar sobre salud mental. Allí, los Duques de Cambridge se divirtieron con un intercambio de regalos y degustaron unos malvaviscos. De Gales se trasladaron a Inglaterra, donde pasaron por Bath y después por Reading. Se produjo un momento muy emotivo con la visita al Royal Berkshire Hospital, lugar en el que nació la Duquesa de Cambridge el 8 de enero de 1982. Para terminar, viajaron a Windsor, donde les esperaban la Reina Isabel, el Príncipe Carlos y Camilla Parker, el Príncipe Eduardo y Sophie Rhys-Jones, así como la Princesa Ana, que disfrutaron de los villancicos interpretados por la orquesta real The Salvation Army Band y mantuvieron un encuentro con voluntarios y trabajadores esenciales de Berkshire a los que la Familia Real Británica quiso agradecer su labor durante la pandemia.
El Royal Train Tour fue todo un éxito, aunque no estuvo exento de polémica. La Primera Ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, mostró su descontento por la visita real teniendo en cuenta que no está permitido cruzar la frontera entre Inglaterra y Escocia salvo por causas justificadas, si bien se trata de un viaje oficial, motivo que tiene una justificación evidente. "El gobierno escocés fue informado de su intención de venir y nos hemos asegurado de que las restricciones vigentes en Escocia se conozcan, para que esto se tenga en cuenta en su decisión y en la preparación de la visita". De todos modos, no hubo más repercusiones que el descontento de la líder escocesa. Desde Gales, el Ministro de Salud, Vaughan Gething, había señalado que era mejor que no se produjeran visitas innecesarias : "Su visita no debe ser usada como excusa para que la gente diga que no entiende lo que se les pide", en referencia a las recomendaciones de que no se viaje. Por su parte, desde el Gobierno Británico se produjo un apoyo sin fisuras al Royal Train Tour, el primero realizado por el Príncipe Guillermo y Kate Middleton.