El 16 de septiembre de 1975 vino al mundo María Zurita de Borbón, a quien le corresponde tratamiento de Excelentísima Señora y dignidad de Grande de España como hija de la Infanta Margarita. Además de ser la hija menor de los Duques de Soria, fue la última de los 10 nietos de los Condes de Barcelona. Esa pequeña de la familia ha llegado a ser una mujer feliz, con éxito, que da gracias a la vida y que ha querido celebrar su 45 cumpleaños en familia y teniendo cuidado debido a la pandemia.
Con motivo de su cumpleaños, María Zurita salió a comer a un restaurante con sus padres, la Infanta Margarita y Carlos Zurita. La Duquesa de Soria, aunque delicada de salud, quiso abandonar por unas horas su domicilio para disfrutar de un almuerzo en familia. No se vio a Alfonso Zurita, hermano de María Zurita, pero sí a Alejandra Rojas, una de sus mejores amigas.
Preguntada por el regalo que había hecho a su hija, la Duquesa de Soria y de Hernani confesó que le había regalado mucho cariño. Al querer saber más, contestó que había un regalo, pero no quiso dar más detalles: " Claro que tenemos un regalo para ella, pero como esta mañana estaba con el niño, con el colegio y todo...", zanjó la hermana de Juan Carlos I.
María Zurita señaló que había recibido regalos muy bonitos y que le habían felicitado familiares y amigos y que evidentemente no iba a haber fiesta debido a la pandemia. Es responsable, y por tanto ha renunciado a un cumpleaños multitudinario y ha preferido una celebración íntima en familia.
La felicidad de María Zurita
Muy activa en Instagram, la prima de Felipe VI no dudó en publicar un largo mensaje de agradecimiento en el que mostró una tierna foto en la que aparece abrazando a su hijo Carlitos. "Y llegaron los 45....en un momento en el que solo puedo dar gracias a Dios y a la vida por todo lo que me ha dado. Soy plenamente feliz con todo lo que he hecho, luchado y conseguido a lo largo estos años ", señaló María Zurita muy emocionada.
"Agradezco a todas las personas que me han ido acompañando durante este tiempo por todo lo bueno (y lo malo) que he aprendido de ellas. De todas he sacado algo positivo. Agradezco a mi maravillosa familia por ser mi roca, mi apoyo incondicional y por supuesto, mi gran ejemplo. Agradezco a mi hijo por ser el ser más mágico que he conocido jamás. Un verdadero regalo del Cielo. Nunca he querido a nadie como te quiero a ti, Carlos, eres mi todo. Y a Zeta, por ser la perra más maravillosa que se puede tener ¡GRACIAS!", finalizó María Zurita, una mujer que se siente plenamente feliz.