El Príncipe Enrique de Gales asistió a diversos actos en Manchester y ofreció sus primeras declaraciones tras conocerse el embarazo de la Duquesa de Cambridge.
El Príncipe Harry empezó la semana con fuerza. Dejó el Palacio de Kensington para trasladarse a Manchester, donde cumplió con varios compromisos oficiales marcados en su agenda a lo largo del día. Así, visitó organizaciones y proyectos que trabajan en favor de la comunidad en la citada ciudad inglesa.
Para empezar, el hijo menor del Príncipe de Gales y Lady Di visitó la sede de Walking With The Wounded en Canada Street, donde se realiza una transición de la vida militar a la vida civil para los veteranos que regresan a casa y necesitan un periodo de adaptación. El Príncipe Harry aprovechó para visitar las obras de Sherpa House antes de acercarse al NHS Manchester Resilience Hub, que está ayudando a las víctimas del atentado del Manchester Arena del pasado mes de mayo. Más tarde, el nieto de la pareja reinante pasó por una sesión de entrenamiento del Manchester City, para finalmente reunirse con el England's Rugby Football League Squad como Patrón de la Liga de Rugby.
Un tío feliz
La expectación era máxima, no solo por lo esperado de los actos, sino porque Kensington Palace había anunciado que los Duques de Cambridge están esperando su tercer hijo. Antes de entrar en la sede de Walking With The Wounded en Canada Street, una reportera de Daily Express le preguntó por la noticia, a lo que contestó que era fantástico y que estaba muy feliz por ellos.
Por otro lado, en relación al estado de salud de la Duquesa de Cambridge, que como en sus anteriores embarazos sufre Hiperémesis gravídica, comentó que no la había visto en un tiempo, pero cree que se encontraba bien, aunque haya tenido que cancelar un acto. Que se sepa, se vieron por última vez el pasado jueves 30 de agosto, cuando los hermanos Gales y Kate Middleton se reunieron para el homenaje a Lady Di en el 20 aniversario de su muerte.