Los Duques de Palma abandonan el exilio en el que vivían desde hace tres años y han regresado a Barcelona para volver a vivir en la ciudad en la que residían hasta su marcha a Washington en septiembre de 2009.
La Infanta Cristina, Iñaki Urdangarín y sus cuatro hijos, Juan, Pablo, Miguel e Irene, se han instalado en su casa de Pedralbes y establecerán nuevamente su vida en la ciudad condal.
En cuanto a Iñaki Urdangarín, el causante del exilio de los Palma y que también ha provocado su vuelta, tiene en mente dedicarse a preparar su defensa junto a su abogado, Mario Pascual Vives, para enfrentarse a los delitos en los que está imputado por el momento, prevaricación, falsedad documental, malversación de caudales públicos y fraude a la Administración.
Las vacaciones de los Duques de Palma en Bidart
Este verano fue diferente para los Duques de Palma por la prohibición de que Iñaki Urdangarín pusiera un pie en Marivent; por ello, la Infanta Cristina se negó a viajar a la isla y envió a sus hijos dos días para que disfrutaran de la compañia de sus primos Lugo, de la Reina Sofía y de la Infanta Elena.
Tras unos días de estancia en Barcelona, los Palma abandonaron la ciudad condal con destino desconocido, que fue revelado días después: El País Vasco Francés. Allí se refugiaron junto a Claire Liebaert y otros miembros de la familia de Urdangarín, que están siendo un gran apoyo para el Duque de Palma.
Estancias en la playa, risas, paseos por la orilla, surf, visitas culturales como la que realizó la familia a las cuevas navarras de Zugarramurdi y otras actividades plagaron las vacaciones de los Urdangarín en Bidart, un tiempo de paz y felicidad en medio de la tensión provocada por el 'Caso Urdangarín'.