Este domingo 29 de abril de 2012 se cumple un año desde que tuviera lugar la gran boda de 2011, así como una de las más importantes que han tenido lugar en el presente siglo XXI, la que unió al Príncipe Guillermo de Inglaterra, primogénito del Príncipe de Gales, y a Catherine Elizabeth Middleton, sellando así una historia de amor que surgió años atrás.
Ese día, Casas Reales de todo el mundo, entre ellas la española, que estuvo representada por la Reina Sofía y los Príncipes Felipe y Letizia, Jefes de Estado y de Gobierno, deportistas, cantantes, aristócratas y otras personalidades, además de amigos y familiares, fueron testigos de la boda del año junto al pueblo británico que se lanzó a las calles y a los millones de personas que siguieron el enlace por televisión o Internet. Tras su boda, los Duques de Cambridge se despidieron ante los medios de comunicación antes de abandonar el Palacio de Buckingham y poner rumbo a las Islas Seychelles, donde pasaron su luna de miel antes de que el Príncipe tuviera que reincorporarse a sus labores militares.
El protagonismo de Guillermo y Catalina
Aunque en un primer momento se señaló que los Duques de Cambridge iban a tener un perfil bajo en la vida oficial debido a que Guillermo debía concentrarse en su trabajo en la RAF, y que además no se quería que eclipsaran al Príncipe de Gales y la Duquesa de Cornualles, lo cierto es que finalmente su presencia ha sido muy destacada como miembros de la Familia Real Británica. Así, Kate se estrenó como Duquesa de Cambridge con motivo de la visita a Reino Unido del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que arribó acompañado de la Primera Dama Michelle. De este modo, Buckingham Palace fue el escenario de la reunión entre las dos parejas, una iniciación de lujo para Catalina.
Más tarde, los Duques de Cambridge participaron en diversos actos con el resto de la Familia Real Británica como el Derby de Epsom, el desfile 'Trooping the Colour', el 90 cumpleaños del Príncipe Felipe de Edimburgo, y la procesión de la Orden de la Jarretera, además de acudir sin los Windsor a la gala benéfica ARK y a Winbledom. Entonces llegó el último día de junio y Guillermo y Catalina iniciaron su primer viaje oficial como Duques de Cambridge, eligiendo como destino Canadá, país que tiene a la Reina Isabel II como Jefa de Estado. Allí visitaron numerosos lugares del país, participaron en diversas actividades y sintieron el calor del pueblo hasta abandonaron el país rumbo a Estados Unidos, donde se rodearon de estrellas de Hollywood en los BAFTA Brits.
Tras el viaje se mantuvieron apartados hasta que en septiembre regresaron a la vida pública para visitar el Royal Marsden Hospital de Belmont, Sutton. La sorpresa llegó en octubre, cuando por primera vez la Duquesa acudió a un acto sin la compañía del Príncipe; así, Catalina presidió la cena de la fundación benéfica 'In kind direct' en Clarence House con resultados satisfactorios. Poco después, los Duques de Cambridge mostraban su lado más solidario -su labor va encaminada a ello- con la visita a un centro de UNICEF en Dinamarca y la colaboración en la realización de paquetes de ayuda alimentaria para el cuerno de África, donde estuvieron junto a los Príncipes Federico y Mary.
La 'separación' de los Duques de Cambridge
En noviembre acudieron a la cena de gala de 'National Memorial Arboretum', participaron en el homenaje a los caídos y la Reina confió en ellos en la recepción a la prensa que tuvo lugar en Buckigham Palace. En diciembre, siguiendo con su labor solidaria estuvieron en el concierto benéfico de Gary Barlow, así como en los Military Awards 2011 y en el 'Centrepoint Camberwell', centro para jóvenes sin hogar ni recursos en el que el Príncipe Guillermo no tuvo reparos en bailar con una chica.
2012 comenzó con el 30 cumpleaños de Kate Middleton, y el estreno de 'War Horse' al que acudieron para apoyar a Steven Spielberg y de paso recaudar fondos, además de con unas vacaciones en el Caribe que sirvieron para que los Duques se despidieran, pues el Príncipe Guillermo puso rumbo a las Malvinas para participar en una misión que le mantuvo lejos de Inglaterra durante varias semanas. La Duquesa, lejos de mantenerse apartada inició una intensa agenda en solitario para visitar los lugares de los que es patrona real e incluso ofreció su primer discurso.
Tras la vuelta del Príncipe, ambos se fueron de vacaciones con los Middleton antes de regresar a sus obligaciones. A su vuelta se han encontrado con una intensa agenda previa a la celebración de su primer aniversario de boda, hecho que festejarán en privado. 2012 es además un año especial para la Familia Real Británica debido a los Juegos Olímpicos de Londres y al Jubileo de Diamante de la Reina Isabel II, donde los Duques de Cambridge también tendrán un papel destacado.