No solo la Familia Real Española tiene escándalos y problemas con Infantas, Duques y demás parientes. En el país monárquico por excelencia, Reino Unido, los Windsor tampoco se libran de los problemas, protagonizados por quien hasta ahora no había sido especialmente polémico, el Duque de York.
El Duque de York llega a esta edad en el que quizás sea el peor momento de su vida por culpa del escándalo provocado cuando Virginia Roberts presentó una denuncia en Florida en la que aseguraba que fue forzada a mantener relaciones sexuales con el Príncipe Andrés cuando tenía 17 años. La Casa Real Británica cerró filas en torno al Duque de York, y también su exmujer, Sarah Ferguson, que manifestó públicamente que el padre de sus hijas nunca cometería ese delito.
Regalo envenenado
Por si fueran pocos los problemas, la Reina Isabel ha hecho un regalo 'envenenado' al tercero de sus cuatro hijos. Según la publicación 'London Gazzete', la Monarca ha nombrado al Príncipe Andrés vicealmirante de la Marina Real, a quien le cede este honor pese a que dejó la Marina a los 41 años para representar los intereses comerciales de Reino Unido alrededor del mundo.
El Duque de York lleva 14 años alejado de la Marina, lo que unido al escándalo por los presuntos abusos sexuales a la menor anteriormente citada, han provocado que la opinión pública no se haya tomado muy bien este nombramiento. Sin embargo, el Príncipe Andrés entró en la Marina Real a los 18, por lo que estuvo sirviendo durante 23 años. Si se demuestra que las acusaciones de la presunta 'esclava sexual' eran falsas, quizás la calma vuelva a la vida del Duque de York.