Ya nadie duda de que los Borbón y Grecia son una familia totalmente desectructurada. La Infanta Elena es quizás la única que mantiene buena relación con todos, pero en realidad hay dos polos bien diferenciados. Por un lado están la Reina Sofía, las Infantas Elena y Cristina y sus respectivos hijos e Iñaki Urdangarín. Por otro están los Reyes Felipe y Letizia, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, mientras que el Rey Juan Carlos es el verso suelto que no tiene mucho interés en estar ni en un bloque, ni en otro.
Sin embargo, Pilar Eyre ha revelado en su nueva columna en Lecturas un hecho que ha llamado mucho la atención. La periodista comenta que durante una reunión familiar en Grecia se puso a hablar con una de sus primas alemanas con las que tiene mucha relación. A la madre del Rey se le iluminaba la cara al hablar de lo educada que era su nieta Victoria de Marichalar y de lo responsable que era Juan Urdangarín.
No se aclara quién es la persona que no deja que la Reina Sofía vea a las dos niñas, y aunque todo apunta a la Reina Letizia por ser ellas suegra y nuera, decir que es Doña Letizia la que tiene vetada a su antecesora sería especular. Asimismo, si es totalmente cierto, la Reina Sofía habrá disfrutado como nadie de la Misa de Pascua del Domingo de Resurrección, ya allí pudo estar con sus nietas pequeñas. Quizás tarde mucho tiempo en volver a verlas.