La muerte de Vulcan deja a la Reina Isabel solo con el dorgi Candy después de su decisión de no criar más perros.
La Reina Isabel no levanta cabeza. A la pérdida de su querida sobrina Lady Elizabeth Anson y de sus amigas Lady Moira Campbell y Lady Celia Vestey a lo largo del mes de noviembre de 2020 se le ha unido el fallecimiento de Vulcan, uno de los dos perros que le quedaban. Vulcan murió en Windsor Castle, donde la Reina Isabel permanece confinada con el Duque de Edimburgo.
La Reina Isabel tiene pasión por los perros, a los que adora tanto que tomó una decisión que ha provocado que solo le quede uno, Candy. Consciente de su avanzada edad, en 2015 decidió no criar más corgis y dorgis para no dejarlos solos cuando muriera, por lo que solo se quedó con Willow, Vulcan y Candy. También se dijo que no quería tener ya tantos perros por temor a tropezar y caer, algo muy peligroso teniendo en cuenta su edad.A la Reina ya solo le quedaban dorgis después de que el último corgi, Willow, tuviera que ser sacrificado en 2018 debido al cáncer que sufría. Willow pertenecía a la descendencia de Susan, corgi que le regalaron en 1944 cuando cumplió 18 años. Desde entonces ha tenido más de 30. Por su parte, el fallecido Vulcan y Candy descienden de los dorgi de Isabel II y de Pipkin, perro salchicha de la Princesa Margarita, que cruzaron a sus mascotas.
Los perros han acompañado a la Monarca durante prácticamente toda su vida. Se ha encargado de ellos con verdadera pasión, y según el Príncipe Andrés le han ayudado al llegar a la vejez. En ese sentido, el Duque de York comentó que los perros le mantenían activa y que daba largos paseos con ellos, un ejercicio muy saludable.Los Cambridge perdieron a Lupo
El fallecimiento de Vulcan ha coincidido en el tiempo con la muerte de otra querida mascota de la Familia Real Británica. Se trata de Lupo, el perro de los Duques de Cambridge: "Tristemente nuestro querido perro Lupo falleció el pasado fin de semana. Ha estado en nuestros corazones y en nuestra familia durante años y le echaremos mucho de menos", señalaron los Duques de Cambridge junto a una imagen de su perro, que llevaba en la familia desde 2011.
Llama la atención la distinta forma que tiene forma que tiene de hacer las cosas la generación más joven de la Familia Real Británica. Mientras que el Príncipe Guillermo y Kate Middleton comunicaron la muerte de su perro a través de las redes sociales, donde le rindieron homenaje, Buckingham Palace no quiso hacer comentarios sobre el fallecimiento de Vulcan por considerarlo un asunto privado.