Es difícil ser más adorable que la Familia Real Sueca, o al menos que la familia de la pareja heredera. Cada año por estas fechas, los Bernardotte ofrecen sus mejores deseos a los ciudadanos de su país a través de fotos y vídeos, donde los protagonistas son la Princesa Victoria, el Príncipe Daniel y sus hijos, la Princesa Estela y el Príncipe Oscar.
Si en otras ocasiones han aparecido haciendo pan o poniendo el árbol de Navidad, en este 2017 han optado por divertirse en la nieve, concretamente en los terrenos del Palacio de Haga, donde han jugado con un trineo y han participado en una batalla de bolas de nieve. El pequeño Príncipe Oscar, poco dado a las sonrisas, se ha mostrado muy feliz y se lo ha pasado en grande jugando con sus padres y su hermana mayor.
Posteriormente, el plano cambio y aparece una de las estancia palaciegas, donde Estela de Suecia reparte galletas para su familia mientras todos se entretienen con juegos educativos. Sin duda, una estampa entrañable y un nuevo éxito de la Casa Real Sueca.
Una princesita muy abierta
Previamente, la Princesa Heredera había acudido a la tradicional recogida de árboles de Navidad de parte de la Universidad Sueca de Ciencias Agrícolas, que cada año ofrece abetos a los Bernardotte. Victoria de Suecia se llevó con ella a la Princesa Estela y al Príncipe Oscar, que a sus casi 2 años ya tiene edad para participar en estos actos.Además de eso, la hija del Rey Carlos XVI Gustavo se desplazó con su primogénita al Oscarsteatern de Estocolmo, donde tenía lugar una representación del grupo de drag queens After Dark. Las dos royals no tuvieron inconveniente en posar con los artistas en una imagen que subió a Instagram el protagonista Christer Lindarw, que fue quien regaló a Estela una boa de plumas que la niña lució encantada. Los Príncipes de Suecia están criando a sus hijos en la tolerancia y la diversidad, y parece que con Estela lo están consiguiendo.