La lengua materna de la Princesa Leonor es el español. Sin embargo, en su formación como Heredera y futura Reina no solo estudia inglés, sino que también se ha familiarizado con las lenguas cooficiales del territorio español. A los 14 años ha mostrado ya no solo dominar el idioma de Shakespeare, sino manejarse a la perfección en catalán y incluso atreverse con unas palabras en árabe.
El Rey Felipe mira orgulloso a la Princesa Leonor mientras pronuncia su primer discurso en los Premios Princesa de Girona 2019Sucedió en su debut en los Premios Fundación Princesa de Girona 2019. Dos semanas y media después de su brillante primera vez en los Premios Princesa de Asturias, Doña Leonor viajó a Barcelona con los Reyes y la Infanta Sofía para presidir los actos de entrega de la Fundación Princesa de Girona. Además de contar con la edad adecuada para hacerlo, se da la circunstancia de que se cumplían sus 10 años, por lo que su presencia era obligada.
Español, inglés, árabe y catalán
Lo más esperado era su discurso, y no defraudó. Saludó en castellano y en catalán, comenzando su alocución en la lengua oficial en todo el Estado: "Me gustaría primero darles las gracias por escucharme en un día tan importante para mí. Es la primera vez que hablo en un acto de la Fundación Princesa de Girona. Y es emocionante hacerlo cuando la Fundación cumple diez años. Tenemos casi la misma edad, hemos ido creciendo casi a la vez. Que lleve el nombre de la Princesa de Girona es un honor para mí por todo lo que simboliza y porque se ocupa del presente y del futuro de la juventud. Y eso es muy bueno para todos", comenzó la Princesa de Asturias y de Girona.
"Quiero felicitar a los premiados de este año y a todos los de años anteriores. Formáis una gran familia de talento, de esfuerzo y de esperanza que seguirá creciendo gracias a la generosidad y el apoyo de tantos y gracias a vuestro compromiso. Sois un ejemplo para los jóvenes de toda España y os admiro mucho porque representáis los mejores valores que la Fundación impulsa desde Cataluña", prosiguió, introduciendo entonces un saludo en inglés a todas las personas que han venido desde lejos, a los que agradeció encarecidamente su presencia. Su buen acento denota que domina bien esta lengua, algo que se espera de quien algún día será la más alta representante de España en el exterior.
Lo sorprendente es que también habló en árabe, ofreciendo unas palabras en este idioma por ser Maria Jammal, la galardonada con el Premio Fundación Princesa de Girona Internacional, cofundadora de la ONG Humanity Crew, y que es hija de árabe. No hay duda de que la Princesa de Asturias y de Girona ha tenido que prepararse a conciencia para este discurso. El público asistente lo tuvo en cuenta y después de estas palabras en árabe le dedicó una ovación.
Y entonces cambió al catalán, con mucho mejor acento y pronunciación que su padre, reflejo que lo ha estudiado desde niña: "Desde bien pequeñas, a mi hermana, la Infanta Sofía, y a mí, nuestros padres nos han hablado de Girona y de Catalunya siempre con verdadero afecto. Gracias a ellos, sabemos muchas cosas de la historia y la cultura catalana. Como Princesa de Girona, quiero honrar la Fundación como se merece. Y portar con orgullo su nombre por toda Catalunya, por el resto de España y por todo el mundo. Para que todos sepan que ocuparse de los jóvenes, de su formación, de que tengan más oportunidades, es contribuir a tener un futuro mejor para todos".
El Rey Felipe besa a la Princesa Leonor tras su discurso en los Premios Princesa de Girona 2019"Gracias a los que nos ayudaron en la creación. Gracias a todos los patronos, gracias a los que han dedicado y dedican tanto tiempo y esfuerzo para que la Fundación Princesa de Girona crezca cada día. Gracias por vuestro compromiso con los jóvenes y con una tierra, Catalunya, que siempre va a ocupar un lugar especial en mi corazón. Muchas felicidades por esta primera década. Por muchos años. Muchas gracias", finalizó la Princesa de Asturias y de Girona, que además de los aplausos de los presentes se llevó la felicitación personal y el beso de un orgulloso Rey Felipe.
