El orgullo de Noruega
Así, se les agasajó en una velada en la que se contó con la presencia del Monarca, de la Reina Sonia, de la pareja heredera, así como de la Princesa Marta Luisa, que no dudó en estar presente. Eso sí, pasó bastante desapercibida y en las imágenes tomadas de la cena apenas se le ve, teniendo así una discreta participación.
El gran comedor del Palacio Real fue el escenario en el que la Familia Real disfrutó de una cena compuesta por salmón y carpaccio de alce como entrantes, fletán como plato principal y postre basado en manzanas que degustaron los 67 atletas que fueron invitados, llegando a un total de 129 personas que se dieron cita en el Palacio de Oslo. Antes de cerrar la vela, la artista Aurora Aksnes subió al escenario para interpretar tres canciones con Fredrik Svabø a la guitarra. Los músicos fueron presentados por la Reina Sonia.
Por su parte, el Rey Harald ofreció unas palabras en honor al equipo olímpico, que se hizo con 4 medallas de oro, 2 de plata y dos de bronce, y al paralímpico, que ganó en Tokyo 2 de oro y 2 de bronce, todo un honor que tiene más mérito si se tiene en cuenta que Noruega solo cuenta con una población que no llega a los 5,4 millones de personas. En sus palabras, reconoció el valor y el esfuerzo de los deportistas, así como el orgullo que siente la Familia Real y toda Noruega por sus atletas.