La primera royal en llegar fue Benedicta de Dinamarca, que se enfundó un vestido rojo y se colocó la Tiara Fringe zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg. Llevó además la banda con la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica que se le había concedido en su momento. Posteriormente llegaron los Príncipes Federico y Mary de Dinamarca con la misma banda que su tía, aunque en su caso recién entregada por Felipe VI horas antes en Amalienborg.
La Reina Margarita de Dinamarca se vistió de verde y se adornó con el Toisón de Oro que le había entregado el Rey Juan Carlos cuando realizó una Visita de Estado a España en 1983 junto a Enrique de Dinamarca. Sacó del joyero la Tiara de Esmeraldas Rosenborg, una pieza custodiada en el Palacio de Rosenborg y que no puede salir del país. La Reina de Dinamarca usó el aderezo completo, que incluyó pendientes, gargantilla y broche.
Minutos más tarde aparecieron los Reyes Felipe y Letizia, que fueron recibidos por la Reina Margarita. Don Felipe y Doña Letizia portaban la Banda de la Orden del Elefante, entregada por Margarita II horas antes. No hubo sorpresas con la elección de la tiara de Doña Letizia, que para las grandes ocasiones como esta tiara que es la gran joya de los Borbones, la Tiara de la Flor de Lis. Como pendientes utilizó unos zafiros de la Reina Sofía, de quien también son los pendientes que se puso para la ceremonia de bienvenida a Dinamarca horas antes.
Sí sorprendió que llevara coleta, pero no tanto que se enfundara un traje azul de tul firmado por Felipe Varela que estrenó en 2015 en la cena de gala en el Palacio Real con ocasión de la Visita de Estado del Presidente de Perú, Ollanta Humala, y que se volvió a poner en Japón en la cena de gala ofrecida por los Emperadores de entonces, Akihito y Masako, por la Visita de Estado de los Reyes al país del sol naciente en 2017.
Los Reyes recibieron los saludos de la prensa española desplazada a Copenhague, a los que saludaron y sonrieron. Seguidamente, se unieron a la Familia Real Danesa para un besamanos en el que Margarita de Dinamarca permaneció sentada debido a que por sus problemas de espalda, motivo que le llevó a la mesa de operaciones en febrero de 2023, no puede permanecer tanto tiempo de pie.
Margarita de Dinamarca se equivocó con la boda de Felipe y Letizia
Ya en el comedor de gala se colocaron la Reina Margarita en el medio, con el Rey Felipe VI a la derecha y la Reina Letizia a su izquierda, situándose a la derecha del Rey de España la Princesa Mary, mientras que Doña Letizia tenía a su izquierda al Príncipe Federico. Fue una buena opción para la Reina, a la que se ha visto muy cómplice con el Príncipe Heredero de Dinamarca. Se une aquí el carácter abierto y simpático de Federico de Dinamarca con el don de gentes de la Reina Letizia. Está claro que hay sintonía entre ellos. Lo mismo ocurrió entre Felipe VI y Mary de Dinamarca, que compartieron charla durante el banquete.
La Reina Margarita, la anfitriona, fue la primera en hablar para "dar una calurosa bienvenida a Dinamarca a Sus Majestades el Rey Felipe y la Reina Letizia. Esta visita no sólo marca los estrechos vínculos entre los españoles y los daneses, sino también las cálidas relaciones entre nuestras dos familias. Recuerdo con placer la magnífica boda de Su Majestad en Madrid en junio de 2004, a la que mi difunto marido, el Príncipe Henrik y yo tuvimos la experiencia de asistir". La Reina Margarita se equivocó aquí al señalar que la boda de Don Felipe y Doña Letizia fue en junio de 2004, cuando en realidad se celebró el 22 de mayo de 2004.
"Existe respeto por la importante contribución de la Casa Real Española al arraigo de la democracia en el país, y por el delicado equilibrio que logra la Casa Real Española al continuar simultáneamente los hermosos rituales del pasado y al mismo tiempo orientar hacia el presente y hacia el futuro", prosiguió la Monarca.
"El futuro, al que estoy segura también contribuirá activamente la Princesa Heredera Española Leonor, que acaba de cumplir 18 años", añadió la Reina de Dinamarca, que mencionó así a la Princesa de Asturias, que alcanzó su mayoría de edad 6 días antes de la celebración de esta cena de gala.
Tomó entonces la palabra el Rey de España: "El hecho de estar aquí en Christiansborg nos hace recordar con mucho cariño nuestra visita con motivo del 75 cumpleaños de Vuestra Majestad. Nuestra estancia aquí nos permite celebrar también los profundos vínculos de hermandad entre las Coronas española y danesa, entre los Reinos de España y de Dinamarca, dos monarquías de larga tradición, conscientes de los intereses y necesidades de sus compatriotas", comenzó el Rey Felipe VI, que destacó el "reinado ejemplar" de Margarita II.
El Monarca recordó además a un personaje histórico no tan conocido, Isabel de Austria. Se trata de la segunda hija de Juana la Loca y Felipe el Hermoso, que recibió su nombre por su abuela, Isabel la Católica, y que llegó a ser Reina de Dinamarca: "Nuestro pasado ha sido fuente en ocasiones de una intensa interacción. No muchos recordarán que, en la segunda década del siglo XVI, una Infanta española, Isabel de Austria, se convertiría por su matrimonio con el Rey Christian II, en Reina consorte de Dinamarca".
"Por tanto, no debe extrañar que, como indican los fondos de las bibliotecas danesas, ya en ese siglo XVI había en Dinamarca lectores interesados en nuestra cultura". Quizás muchos lo olvidaron, pero no parece que lo hicieran Federico y Mary de Dinamarca, que llamaron a su segunda hija Isabella.
"Quisiera reiteraros nuestra gratitud, de la Reina y mía, por la formidable hospitalidad que Dinamarca nos ofrece a través de Vuestra Majestad. También por la oportunidad que nos da de reencontrarnos, recordando la proximidad y parentesco de nuestras familias. Es también motivo de alegría compartida que seamos testigos casi en paralelo del importante hito que supone la mayoría de edad del Príncipe Christian y la Princesa Leonor", siguió el Monarca.
"Ellos, el Príncipe Christian y la Princesa Leonor son la nueva generación que representa la continuidad en el compromiso de ambas Monarquías parlamentarias, respectivamente, con su Nación, su pueblo y su democracia, en el seno de la Unión Europea", finalizó Felipe VI, que habló así también de la coincidencia en el tiempo de la entrada en la mayoría de edad de su hija mayor y de la del primogénito de Federico de Dinamarca.
Tras los discursos, todos brindaron y bebiendo, incluida la Reina Letizia, que no bebe alcohol, pero sí se lleva la copa a los labios. El champán servido para la ocasión fue Moët et Chandon, mientras que los vinos llegaron de Cayx, de los viñedos propiedad de la Familia Real Danesa en Francia.
En concreto, degustaron 'La Cigaralle du Prince', de 2021, y un 'Chateau de Cayx', cosecha de 2018. El menú se completó con soufflé de lenguado con verduras, ciervo con timbal de coliflor, cerezas de Gråsten, donde la Familia Real Danesa pasa parte de sus vacaciones de verano y pastel Concorde.
El Royal Life Guards Music Corps interpretó para amenizar la velada 'Amparito Roca', 'Camrne', 'El Relicario' o el Adagio del Concierto de Aranjuez, así como 'Viva la vida' de Colpdplay, entre otros temas. Con respecto a las flores, la Reina Margarita recogió decoración otoñal para adornar una cena de gala con la que se agasajó a los Reyes Felipe y Letizia en su primer día de Visita de Estado a Dinamarca.