El pasado viernes 20 de abril se celebró un almuerzo en el Palacio Real. Los Reyes invitaron a una representación del mundo de las letras con motivo de la entrega del Premio Cervantes 2017, que el lunes 23 fue entregado por el Monarca al escritor nicaragüense Sergio Ramírez.
El Rey Felipe y la Reina Letizia atendieron a los cerca de 250 invitados. Todo sucedió con normalidad, y de hecho hubo gestos cómplices entre la pareja en un momento en el que se ha vuelto a poner en cuestión su matrimonio tras el rifirrafe entre las Reinas. Todo el mundo mira con lupa cada gesto y cada detalle, por lo que es importante que en público, la Familia Real tenga un comportamiento ejemplar, y más en estos tiempos convulsos.
Se fue sin avisar al Rey
Iba todo bien. Los Reyes ofrecieron un aperitivo, hubo un besamanos y después un almuerzo con brindis a cargo del Jefe del Estado. La cosa no acabó ahí, porque después se pasó al café, un momento para formar corrillos y que los Reyes puedan hablar más o menos con todos los invitados.
Como señala LOOK, testigos presenciales dieron a conocer lo que ocurrió durante ese café. La Reina Letizia se marchó sin dejar rastro. Hubo quien se dio cuenta, aunque no el Rey Felipe, que estaba conversando con los invitados hasta que un escolta le comunicó que era hora de irse. Fue ahí cuando el Monarca buscó a la Reina Letizia, porque debían irse juntos, pero no la encontraba por ninguna parte. "¿Dónde está la Reina?", preguntó Felipe VI al escolta, que le respondió algo que no pudo ser oído por los informantes.
El Rey se quedó estupefacto al darse cuenta de que su consorte se había marchado sin decirle nada. Se desconoce las razones que tuvo para irse, que podrían ser entendibles, pero el mal gesto fue no avisar a Felipe VI, que se llevó una sorpresa poco agradable.