Muchos han sido y son los famosos que se olvidan de que son caras conocidas que están en el punto de mira de los paparazzi. Cuando llega el calor y la acción se traslada a las playas, los fotógrafos cogen la maleta y se escapan junto al mar para estar cerca de las celebrities a las que intentan pillar en un renuncio, y si es sin ropa, mejor. De esto no se ha escapado nadie, ni actores y actrices, ni cantantes o modelos, ni tampoco aquellos a quien pillar desnudos en un escándalo y una jugosa venta: a la realeza.
Los Grimaldi ocupan el Trono de Mónaco, además de ser una de las sagas más perseguidas por la prensa. En parte viven de ello, y les encanta ofrecer titulares y vender imagen, aunque en ocasiones les gustaría no haberse quitado el bañador o el bikini sin haberse cerciorado de que nadie miraba. Gracias a su indiscreción, el mundo entero ha podido ver las partes íntimas de la Familia Real más desenfadada de todas las que siguen reinando en la actualidad en el mundo.El Príncipe Alberto es desde 2005 Jefe del Estado de Mónaco, con todo lo que ello conlleva. Su fama de juerguista es solo pasado, pues a sus 58 años se dedica en cuerpo y alma a su labor institucional y a todo lo que implica ser la máxima autoridad del pequeño pero rico país mediterráneo. En su momento era todo un terremoto que traía de cabeza a sus padres, los recordados Raniero de Mónaco y Grace Kelly. Iba de fiesta en fiesta, y también parece que de mujer en mujer, siendo prueba de ello los hijos que tuvo cuando estaba soltero, Jazmin Grace (1992) y Alexander (2003).
A principios de los 80 se publicaron unas fotos en la revista Hustler en la que el Príncipe Alberto aparecía totalmente desnudo. Las fotografías fueron tomadas cuando se tiraba al mar en una jornada en la que se lo pasó tan bien con una chica, que quizás no le importó tanto que su anatomía fuera mostrada en las páginas de la publicación. Afortunadamente para él, las instantáneas no tuvieron tanta repercusión como cabría esperar.
El escándalo volvió a llegar en 2004, cuando el diario sueco Aftonbladet reveló que tenía unas fotografías del entonces Heredero al Trono desnudo en la nieve con una mujer y tres hombres. Las instantáneas habrían sido tomadas en Kattuwerna, al norte de Suecia, y pese al revuelo mediático montado, nunca salieron a la luz.
La Princesa Carolina siempre ha sido más comedida que su hermana, aunque ello no evitó que en 1989 fuera pillada cambiándose el bañador tras una jornada de navegación. En las imágenes publicadas por Pronto se puede ver a la Princesa de Hannover, entonces viuda de Stefano Casiraghi, quitándose el bikini tapada por una toalla y ayudada por un hombre. Lamentablemente para ella, desde el ángulo desde el que se tomaron las instantáneas se apreciaba uno de sus pechos.
Los exmaridos de las dos hermanas también fueron expuestos. El más perjudicado fue Daniel Ducruet, que en 1996 protagonizó la portada de Interviú desnudo y manteniendo relaciones sexuales con una bailarina de streaptease. Además de ver sus vergüenzas en una revista, la Princesa Estefanía le pidió el divorcio. Al menos, Ducruet denunció a la cabaretera y a los fotógrafos y ganó el juicio. Por su parte, Ernesto de Hannover fue pillado con el culo al aire a bordo de un barco cuando todavía estaba casado con la madre de su hija Alexandra.
El poco pudor de los hermanos Casiraghi y Pauline Ducruet
La generación más joven también ha sufrido la pericia de los paparazzi. Los más perjudicados son los hermanos varones Casiraghi, que han visto cómo sus partes más íntimas quedaban al descubierto ante el mundo entero. Andrea Casiraghi es todo un experto en desnudarse, y parece que le importa bien poco pasearse con sus intimidades al fresco.
Son varias las ocasiones en las que ha sido pillado cambiándose el bañador en el Pacha III, el barco de su madre. Ha sido ahí cuando fue captado totalmente desnudo. Otra vez fue fotografiado cuando se quitaba el bañador en una playa a la vista de todo el mundo, aunque por suerte para él, solo se le veía de perfil. Más gracioso fue cuando se sentó al sol de Ibiza en junio de 2011. Aunque llevaba bañador, al ser este corto y haber tenido las piernas abiertas, uno de sus testículos quedó a la vista, momento que aprovechó un paparazzi para inmortalizar el momento.
Peor ha sido el trance para Pierre Casiraghi. El tercer hijo de la Princesa de Hannover es mucho más comedido que su hermano mayor, y aunque es fiestero, siempre ha tenido la cabeza mejor amueblada en todos los aspectos. No había sido pillado desnudo nunca hasta que un día del año 2009 se le ocurrió quitarse el traje de neopreno en la cubierta de un barco. Así, quedó al descubierto su pene casi en todo su esplendor.
Finalmente está Pauline Ducruet. La hija de Estefanía de Mónaco y Daniel Ducruet ha seguido la estela de sus padres y ha protagonizado su propio desnudo de portada. En febrero de 2016, la revista italiana 'Diva e donna' publicó unas fotos de la sobrina de Alberto de Mónaco en topless.
Pauline Ducruet si abbronza in topless, la figlia di Stephanie di Monaco è scandalosa https://t.co/C1t8W1BcZppic.twitter.com/IqixXbUyoe
? allnews24 (@allnews24eu) 25 de febrero de 2016
La joven llevaba un bikini estampado con poca tela, y decidió desprenderse de la parte de arriba para que sus pechos cogieran el mismo tono broceado que el resto de su cuerpo durante una vacaciones en Australia. Lo más llamativo fue comprobar que Ducruet tiene un piercing en el pezón derecho, algo muy habitual entre muchas chicas de su edad, pero no tanto entre mujeres de sangre real. Pauline Ducruet ha sido la última pillada de su familia, al menos por el momento.