Si por algo se caracteriza Mohammed bin Rashid Al Maktoum, jeque árabe y emir de Dubái, es por los continuos escándalos en los que se ve involucrado. El Primer Ministro de los Emiratos Árabes Unidos se encuentra casado con 6 mujeres y tiene 23 hijos correspondientes a sus diferentes esposas.
Si bien es sabido que las mujeres de los jeques árabes de los emiratos árabes no suelen ser muy conocidas por la prensa, en su caso no ha pasado lo mismo. De las 6 al menos 3 de ellas son conocidas y son:Hind Bint Maktum Bin Juma al-Maktoum, con la que comparte 12 hijos; Zoe Grigorakos, tienen 1 hija con ella y Haya Bint Al Husein con dos hijos.
Polémicas
El emir se ha tenido que enfrentar a lo largo de su vida a varios desencuentros familiares, en los que algunos han terminado con la huida de sus hijas del hogar. Primero fue Shamsa bint Mohammed Al Maktoum, quien en el año 2000 huyó cuando tenía 19 años. Para ello, la Princesa escapó del domicilio de Surrey en un coche, se trasladó en él hasta Chobham Common y después salió del lugar corriendo. Después de varias semanas desaparecida, y de su padre haber enviado a las fuerzas del Estado para su rescate, Samsa fue encontrada y llevada de vuelta a su país.
El escándalo que se produjo se quedó estancado tras su devolución. En ese momento se publicaron unos datos policiales en los que se declaraba que Sheikha Shamsa fue encontrada en Cambridge y los servicios de seguridad la secuestraron en la calle para enviarla inmediatamente devuelta con su familia. Como excusa la familia del jeque añadió que era una joven testaruda que anhelaba un estilo de vida occidental.
Pero esta no ha sido la única vez que una hija del Primer Ministro de Dubái ha intentado escapar. En el año 2018, la Princesa Latifa. Esta vez, la hija del emir huyó en yate. La estrategia no le duró mucho ya que fue inmediatamente capturada. Pero la Princesa se guardó un as debajo de la manga y publicó un vídeo en las redes sociales en el que hablaba de su situación personal y se describía como una prisionera. En el mismo también aprovechó para acusar a su padre de torturas.
Desgracias
En el año 2016 el emir de Dubái tuvo que enfrentarse a una desgracia familiar. Su hermano Maktum bin Rashid murió tras un infarto en un hotel de lujo de la Costa Dorada australiana. El que fuera Primer Ministro de los Estados Árabes Unidos falleció a los 62 años. Como consecuencia de este hecho, el cargo pasó a manos de su hermano pequeño, Mohamed bin Rashid Al Maktum. Entre las obras por las que se destacan su hermano fallecido se encuentra su gran apuesta por el petróleo, llegando a ser un gran competidor de Honk Kong o Singapur. En la época en la que el jeque Maktum bin Rashid fue Primer Ministro, los Emiratos Árabes Unidos se caracterizaron por convertirse en un culto a la edificación.
Después de esta tragedia, ocurrió la muerte de uno de sus hijos. En este caso se trataba de Sheikh Rashad bin Mohammad. Las causas de la muerte también fueron un infarto y murió con tan solo 33 años. Tras la triste noticia el Gobierno de los Emiratos Árabes puso tres días de luto y las banderas a media asta. El hijo heredero hacía ya un tiempo que se alejó de la vida política tras no ejercer su cargo de Príncipe. El entierro se realizó en el cementerio del área de Bur Dubái.Polémicas
A pesar de todos los rumores que han rodeado al jeque, él siempre se ha mostrado tal cual es en sus redes sociales. Incluso tras la polémica de la desaparición de su mujer Haya de Jordania, Mohamed bin Rashid no dudó en dedicarle un tuit diciéndole: "¡¡Vete con quien estés ocupada ahora!!". Al ser un apasionado de la poesía entre otras cosas, otro día también decidió enviarle a la más joven de sus seis esposas un dardo envenenado en forma de poesía. Aunque sean muchos los intentos por lavar la imagen del jeque árabe, él mismo se deja al descubierto tanto con sus actuaciones como por sus publicaciones en esta red social.
Entre otras muchas polémicas también se encuentra la gran fortuna de la que dispone y que malgasta en sus aficiones. Aunque en su página web se intente decir que el emir también invierte su dinero en la creación de organizaciones sociales, es verdad que también cuenta con una larga lista de sus caros caprichos como el yate más grande del mundo o el mejor campo de golf de Escocia.