Después de casarse con el chamán Durek Verrett, pese a las polémicas que ha traído, la Princesa Marta Luisa de Noruega ha querido dar un paso más en su vida. El feliz matrimonio quería mudarse a una nueva casa. Sin embargo, las reformas que la Princesa Marta Luisa tenía pensado hacer en su nueva vivienda, se han visto paralizadas hasta nuevo aviso por la burocracia noruega y han frenado de golpe los deseos de futuro de la pareja.
Marta Luisa de Noruega y Durek Verrett, cogidos de la mano en su bodaTal y como ha podido saber el diario noruego Se Og Hor, la vivienda de la que se habla la habría adquirido la Princesa Marta Luisa y se trata de una casa valorada en 18,65 millones de coronas noruegas, lo que equivale a unos 1,6 millones de euros. Esta propiedad se ubica en el área residencial de Stabekk, un pequeño pueblo con cerca de 6.000 habitantes que forma parte del municipio de Baerum. La localidad está situada a pocos kilómetros de Oslo, la capital del país.
El citado medio también tuvo acceso a un folleto informativo de la inmobiliaria encargada de la venta de esta parcela, donde describían la casa como "una encantadora casa unifamiliar ubicada en una tranquila zona". Asimismo, se destaca que la vivienda es espaciosa, contando con tres salones y seis dormitorios, un lugar ideal que, con toda probabilidad, la pareja compartirá con las tres hijas de la Princesa Marta Luisa.
No obstante, este plan no podrá realizarse de momento, ya que las autoridades noruegas han impuesto obstáculos en cuanto a las reformas que la Princesa planeaba realizar para transformar la casa. De hecho, la situación parece tan complicada que algunos medios locales incluso mencionan la posible cancelación de los planes de remodelación de la vivienda. Entre las mejoras propuestas por la Princesa se encuentra la remodelación del tejado, buscando un diseño más asimétrico y original.
El motivo de la prohibición de las remodelaciones
La paralización de las obras de la casa de la Princesa Marta Luisa se debería a que las reformas que propuso la hija del Rey Harald van en contra de una regulación detallada que existe para el área en la que se encuentra la casa, con el objetivo de proteger los monumentos culturales, los entornos históricos y los valores naturales.
Marta Luisa de Noruega y Durek Verrett en las celebraciones de su bodaEsto incluye una evaluación cuidadosa de las ampliaciones permitidas, con el fin de limitar la densificación del área. Unos trámites burocráticos que muchos vecinos apoyan, ya que no todos están de acuerdo con cambiar el aspecto de una de las viviendas más emblemáticas de la zona. Actualmente, la Princesa Marta Luisa y Durek Verrett enfrentan la incertidumbre de no saber si podrán terminar la construcción de la casa de sus sueños.
