La influencer y su prima, Irene Urdangarin, fueron abroncadas por la tripulación durante el vuelo en clase turista. Sus madres viajaban en clase 'business'.
El pasado 5 de enero de 2024 el Rey Juan Carlos celebró su 86 cumpleaños con una fiesta como nunca antes desde que se mudó a Abu Dabi en el verano de 2020. El Rey Emérito contó con hasta 100 invitados en un evento en la isla Zaya Nurai (donde vive) entre los que se encontraban algunos imprescindibles para él como su amigo Pedro Campos -quien le acoge en su casa de Sanxenxo en todas sus visitas-, el dúo Los del Río, quienes pusieron la banda sonora al evento, y por supuesto parte de su familia.Hasta allí viajaron sus dos hijas, la Infanta Elena y la Infanta Cristina, ambas en compañía de sus hijos (no todos): Froilán -que vive también allí-, Victoria Federica, Irene Urdangarin y Pablo Urdangarin, que además iba también acompañado de su actual pareja, Johanna Zott, demostrando así que su relación está cada vez más afianzada y que la joven ya es una más en la familia de su novio, una familia poco común.
De la fiesta -que se ha podido ver un poco ahora gracias a las fotografías publicadas en la revista ¡Hola!- se ha podido saber algún detalle gracias también a Los del Río durante una entrevista con Sonsoles Ónega. El dúo aseguró que todos los nietos del Emérito estuvieron muy integrados en la fiesta y también animados haciendo pasar muy buen rato a su abuelo que estaba radiante de felicidad: "Los chiquillos, encantadores, muy sencillos y normales. Disfrutó muchísimo con sus nietos y sus hijas", que no dudaron en levantarse a bailar con algunos de sus temas más míticos como 'La Macarena'.
Las Infantas, en 'business', sus hijas, en clase turista
Pero el viaje no estuvo exento de polémicas y, de nuevo, Victoria Federica es la protagonista de una de ellas. Si bien la fiesta salió a pedir de boca para todos volviéndose felices a España, fue durante el vuelo desde Abu Dabi cuando se produjo este altercado. Según han contado en 'TardeAR', las Infantas Elena y Cristina viajaron de vuelta a España en compañía de sus dos hijas, Victoria Federica e Irene Urdangarin. En cambio, las dos hermanas lo hacían en 'business' mientras que las jóvenes lo hacían en clase turista en compañía de dos guardaespaldas.
Durante el vuelo -que suele durar unas 7 horas y 50 minutos- las dos primas se levantaron al cuarto de baño las dos juntas y lo hacían escasos minutos antes de que se sirviese la cena. Un momento en el que los carros de la tripulación con los que repartirían la comida ya estaban colocados y cerrando el paso en los pasillos. Por ello, la tripulación no dudó en decirle a las dos jóvenes que no era el mejor momento para levantarse de sus asientos, algo que no le sentó nada bien a Victoria Federica y así se lo hizo saber. Mientras que su prima Irene Urdangarin guardaba silencio, la influencer les hacía saber a los y las azafatas que no le gustaba nada que le regañasen por algo tan común como ir al servicio durante un vuelo tan largo.