Después de 6 años, la supuesta hija ilegítima de Alberto de Bélgica, Delphine Boel, consigue una sanción si el Rey se niega a hacerse las pruebas de paternidad.
Delhpine Böel, la mujer belga que asegura ser hija de Alberto de Bélgica, está cada vez más cerca de demostrar su verdad. La supuesta hija ilegítima del Rey solicita le reclama una sanción de 5.000 euros diarios por cada uno de los días que se niegue a hacerse las prueba de paternidad que lleva solicitando desde 2013. Esta medida de presión se ha puesto en marcha después de que el pasado jueves se llevaran a cabo las alegaciones en el Tribunal de Bruselas.
Ante la insistencia de Delhpine Böel de que Alberto de Bélgica se realice las pruebas de ADN, el Monarca se ha resistido desde el principio a colaborar con la justicia apelando al Tribunal de Casación la decisión que le obligaba a someterse a estas pruebas para comprobar si realmente es su padre biológico o no.Ejerciendo mucha presión
Ante esta negativa, la belga y su abogado, Marc Uyttendaele, decidieron en febrero emprender esta medida de presión para conseguir que el Monarca se someta finalmente a este examen genético. Según han anunciado varios medios belgas, la resolución de esta petición se conocerá en las próximas semanas.
Aunque el Tribunal de Apelación de Bruselas instó a Alberto II el pasado mes de noviembre para realizarse la pruebas en un plazo de 3 meses, después de comprobar que Jacques Böel no es realmente el padre biológico de la Delphine, el Rey emérito se negó. El Tribunal será el que tenga la última palabra sobre la petición de Delhpine Böel de reclamar 5.000 euros diarios hasta que Alberto de Bélgica ceda a realizarse dichas pruebas.