Galería: La Familia Real Belga en imágenes
La miniserie documental 'Delphine: mi historia' sigue revelando algunos de los momentos más interesantes de la hija del Rey Alberto de Bélgica. La última entrega de esta serie emitida VTM ha revelado cómo fue el 9 de octubre de 2020 el primer encuentro de la Princesa Delphine con su hermano, el Rey Felipe de Bélgica, que ella misma ha calificado como "un final feliz para esta historia".
Felipe de Bélgica y su hermana Delphine Boël en su primer encuentroLa reunión acabó con la publicación de un comunicado conjunto al que acompañaba una imagen de ambos: "Aquel encuentro fue fantástico y muy divertido. Me sorprendió positivamente el talante de Felipe y la forma en que me acogió", reconocía la Princesa Delphine sobre aquel cálido encuentro con el que ponía fin a una larga batalla judicial para ser reconocida como hija del Rey Alberto de Bélgica, con quien se reunió unas semanas después.
La relación avanza
El encuentro entre el Rey Felipe de Bélgica y su hermana se produjo en el Castillo de Laeken, donde disfrutaron de una extensa conversación sobre sus propias vidas e intereses comunes: "Hay que entender que él es el Rey, ante todo, algo que le impide estar completamente relajado, aunque mientras estuvo conmigo parecía estar tranquilo y creo que fue muy sincero", explicaba Delphine de Bélgica en su serie documental.
Delphine de Bélgica en el Día Nacional de Bélgica 2021La Princesa también tuvo tiempo para recordar la primera vez que se reunió con su padre después de que este la reconociera como su hija: "La energía en esta reunión fue realmente buena porque somos muy similares", aseguraba. Una relación que no ha terminado de consolidarse pero que avanza a buen ritmo y que seguirá desarrollándose en un contexto familiar con el único objetivo de normalizar su vínculo fuera del panorama mediático.
Esta serie documental no es el debut televisivo de Delphine de Bélgica, que a finales de 2021 anunció su participación en el programa 'Dancing with the stars', del que fue eliminada recientemente, quedando en la séptima posición de la clasificación final. Una decisión que contaba con el visto bueno de la Casa Real belga, que entendió que aquella era una iniciativa privada de la Princesa que en nada afectaba a la institución.
