Si hay un acto solemne para la Familia Real Británica ese es Trooping the Colour. Habitualmente tiene lugar el segundo sábado y en este desfile militar se conmemora del Rey o Reina, sea cuando sea su cumpleaños real. En el caso de la Reina Isabel el 21 de abril celebra su cumpleaños en privado, aunque suele conmemorarlo con una foto oficial, mientras que deja las celebraciones oficiales para Trooping the Colour.
En 2022 la cita ha sido doblemente importante. Por un lado volvía a celebrarse como se ha hecho siempre, con el desfile militar en Horse Guards Parade, la procesión de parte de la Familia Real Británica en distintos carruajes y el saludo desde el balcón de Buckingham Palace. Este acto ha sido particularmente emotivo tras dos años en los que se celebró en Windsor en formato reducido por la pandemia. Y por otro lado, porque Trooping the Colour ha supuesto el pistoletazo de salida a los actos centrales por el Jubileo de Platino.
Desfile, carruajes y saludos
Justo en la víspera se divulgó un retrato oficial de la Reina Isabel, así como un mensaje emitido con motivo de la celebración de su Jubileo de Platino. Ya a la mañana siguiente, los miembros de la Casa Real Británica se han reunido para festejar el cumpleaños oficial de la Monarca, aunque tomando posiciones distintas. La Reina Isabel ha recorrido The Mall en coche y no ha pasado revista a las tropas ni nada parecido. Debido a su avanzada edad y a sus problemas de movilidad ha delegado toda responsabilidad al Príncipe Carlos y ha preferido limitarse a asistir, a dejarse ver y a saludar desde el balcón de Buckingham Palace. Para Isabel II ya ha sido un esfuerzo, pero por nada del mundo quería perderse Trooping the Colour.
En los carruajes se ha visto a Camilla Parker, Kate Middleton, radiante vestida de Alexander McQueen y con tocado de Philip Treacy, y a los Príncipes Jorge, Carlota y Luis, que han viajado juntos en el mismo coche de caballos. Para los tres hijos de los Duques de Cambridge no era su primer Trooping the Colour, pero sí ha supuesto su debut en el desfile en carruaje, un paso muy importante que todos han disfrutado, si bien ha habido un momento entre hermanos cuando la Princesa Carlota ha indicado a su hermano pequeño, el Príncipe Luis, que dejara de saludar tanto.
En el siguiente carruaje viajaban el Príncipe Eduardo y Sophie de Wessex con sus dos hijos, Lady Louise Mountbatten-Windsor y James Mountbatten-Windsor, Vizconde Severn. Cerrando la comitiva, más corta que en otros tiempos en los que se invitaba a más miembros de la Familia Real Británica, han estado Sir Timothy Laurence y los Duques de Gloucester. Por su parte, el Príncipe de Gales, el Príncipe Guillermo y la Princesa Ana no iban en los carruajes debido a que participaban en el desfile, por lo que no se reunieron con el resto de la Familia Real Británica hasta que no terminó el desfile y salieron todos a saludar desde Buckingham Palace.
Pasadas las 12:00 horas, los Príncipes Carlos, Guillermo y Ana ya había pasado revista a las tropas para dar comienzo al desfile en Horse Guards Parade. El Príncipe de Gales lució un uniforme de la Guardia Galesa mientras cabalgaba al caballo George. El Duque de Cambridge se había enfundado su uniforme de la Guardia Galesa y desfiló cabalgando a Derby, mientras que la Princesa Real fue a caballo de Sir John con su uniforme de Coronel of the Blues and Royals.
Desde una ventana, La Duquesa de Cornualles, la Duquesa de Cambridge y sus tres hijos siguieron el desfile en Horse Guards Parade hasta que un coche les trasladó a Buckingham Palace. Allí, hacia las 13:20, las puertas que dan acceso al balcón principal se han abierto para que salieran la Reina Isabel y el Duque de Kent, su primo, y el mismo que en 2021 le acompañó en Trooping the Colour en Windsor Castle. Ambos han permanecido allí 10 minutos hasta que han vuelto a entrar.
Los tres miembros de la Casa Real Británica que participaron en el desfile a caballo se unieron posteriormente al saludo desde Buckingham Palace, un momento reservado para los royals activos, es decir, lo que representan a la Reina, que saludan a la ciudadanía congregada en los alrededores de Buckingham Palace y vieron cómo la Royal Air Force pintaba los colores de la bandera de Reino Unido en el cielo en honor a la Reina, por su cumpleaños y en esta ocasión también por su Jubileo de Platino. Y así empezó por todo lo alto una celebración para recordar, una celebración histórica para Reino Unido y la Commonwealth al ser la primera vez que un Monarca británico celebra 70 años en el trono, algo que quizás nunca vuelva a ocurrir.