La Princesa por matrimonio protagoniza un reportaje de ocho páginas con fotos muy cuidadas en él asegura que es una mujer muy discreta y que no desea ser famosa, pues la fama ni le conviene ni le interesa, y solo ha salido a la palestra porque creía conveniente hablar, debido a que su silencio se estaba malinterpretando.
Las dañinas especulaciones sobre el viaje a Botsuana
No ha dudado en hablar sobre su relación con el Rey Don Juan Carlos, con quien dice que comparte una amistad cercana, pero nada más. Corinna cuenta que se conocieron en 2004, y que tiene un gran respeto tanto por su figura como por la del Príncipe Felipe.
Corinna sigue hablando del Monarca, pues dice que "es el mejor embajador de España en el mundo. Se le admira y reverencia allá donde va. Hay fuerzas que utilizarían cualquier cosa para desacreditar la Monarquía y a España, pero no voy a hacerles el juego. Tienen a la persona equivocada", comenta Corinna, ofreciendo aquí unas palabras similares a las de la entrevista en el rotativo de Pedro J. Ramírez.
No podía obviar el viaje a Botsuana que tantos disgustos causó al Rey tanto con su salud, como con su familia y con los españoles, y que sirvió para que saliera a la luz el nombre de Corinna zu Sayn-Wittgenstein. Sobre el viaje señaló que las especulaciones "fueron innecesarias y dañinas", pues además ha querido dejar claro que fue con su hijo, y por tanto en familia.