El nombre de Corinna zu Sayn-Wittgenstein cobró gran fama en España cuando se supo que ella estaba junto al Rey Juan Carlos en el momento del safari en Botsuana, un viaje por el que el padre de Felipe VI tuvo que pedir disculpas públicas. La amistad entre el Rey Emérito y Corinna salió a la luz y con ello los rumores de un romance comenzaron a crecer. Años después, la prensa británica ha recogido nuevas declaraciones de la conseguidora en las que asegura que lleva años sufriendo una grave campaña de difamación y acoso por parte de los Servicios de Inteligencia españoles.
Según ella misma ha relatado, el CNI ha tratado de convertir su vida en un infierno y además ha recibido numerosas amenazas e intimidaciones y por ello, Corinna estaría dispuesta a acudir al Tribunal Superior con el objetivo de denunciar estos hechos aportando pruebas que demostrarían su versión. Daily Mail asegura que la lista de denuncias de Corinna es larga y está repleta de supuestos episodios vividos en primera persona en donde el Servicio de Inteligencia español habría supuestamente atacado a la examante del Rey Juan Carlos con el fin de proteger secretos de Estado que ella conoce.
James Lewis QC es la persona que dirige el caso del Tribunal Superior al que Corinna se ha dirigido, siendo el mismo magistrado que se encarga del caso de Julian Assange. Además, los abogados de Corinna podrían haber dado un paso más y haber escrito al Ministro del Interior, Priti Patel, y al Secretario de Relaciones Exteriores, Dominic Raab, para advertirles de que este proceso podría acarrear una posible disputa diplomática entre Reino Unido y España. "No me queda otra opción que emprender acciones legales después de ocho años de abusos, incluyendo amenazas contra mis hijos", ha asegurado Corinna.
Diferentes episodios vividos
Entre los episodios que Corinna asegura haber vivido, destaca el que vivió ella y su asistente, Melissa Holloway en 2012. Según han contado ambas, el apartamento de Corinna en Mónaco estuvo ocupado durante más de un mes por mercenarios franceses y polacos, los cuales según el Servicio de Inteligencia español eran empleados para así asegurar su protección, pero que la examante del Rey Juan Carlos considera que en realidad ocuparon su casa con el objetivo de eliminar documentos. "Estaba en peligro constante. Parecían paramilitares e inmediatamente tomaron el control total de la propiedad. El estrés fue abrumador. Claramente no estaban allí para protegernos ", ha asegurado Corinna.
Otro de los episodios que Corinna defenderá ante los tribunales es la supuesta intimidación que sufrió por parte del CNI en su habitación del The Connaught Hotel en Londres. "Después de la intrusión del servicio de inteligencia en la habitación de mi hotel, me aterré especialmente cuando amenazaron mi vida y las de mis hijos al decir que no podían garantizar nuestra seguridad física", ha confesado Corinna, quien también asegura que el CNI le insistió en que se quedase en silencio: "Me enviaron un correo electrónico con un pseudónimo que explicaba que si hablaba con los medios, sería devastador para mi imagen. Supuse que esto significaba que si no cooperaba completamente, mi reputación sería destruida. De hecho, esta amenaza se llevó a cabo con mucho éxito", ha contado Corinna al citado medio.