Christian de Dinamarca se convirtió en Príncipe Heredero el 14 de enero de 2024 cuando la Reina Margarita abdicó en favor de su hijo, Federico de Dinamarca. En los primeros meses de reinado de su padre, su vida no cambió demasiado salvo cuando ha tenido que ejercer de forma concreta como regente.
Pese a su nueva posición, ha seguido centrado en sus estudios, y una vez los terminó, ha optado por tomarse un año sabático antes de comenzar su formación universitaria y militar.
En concreto, el Príncipe Christian viaja el 4 de septiembre de 2024 a África Oriental, donde permanece hasta diciembre del mismo año para participar en el funcionamiento diario de dos granjas. Como dijo cuando se graduó, sus planes eran ver mundo, y así será durante unos meses.
Antes de su viaje, se le encargó que ejerciera como Príncipe Heredero y representante de la Casa Real Danesa en los Juegos Paralímpicos de París 2024, que se celebran entre el 28 de agosto y el 8 de septiembre de 2024. Previamente había estado en los Juegos Olímpicos, pero brevemente y acompañando a Federico X, por lo que esta visita a los Paralímpicos ha tenido mayor relevancia.
El futuro Rey de Dinamarca ejerció como Príncipe Heredero por primera vez en solitario en el extranjero, y la experiencia parece que fue muy positiva. Para empezar, posó por la Torre Eiffel, y después animó a los deportistas paralímpicos daneses vestido con el polo de su país.
Se le vio especialmente cómplice con el nadador Alexander Hillhouse, que logró una medalla de oro para Dinamarca. Ambos charlaron y Hillhouse enseñó la medalla al Príncipe Heredero, que le felicitó por su gesta.
Lo cierto es que ya se conocían del 18 cumpleaños del Príncipe Christian, que el 15 de octubre de 2023 celebró su mayoría de edad con una cena de gala en Christiansborg a la que fueron invitados jóvenes de 18 años de todo el Reino de Dinamarca y a jóvenes del mundo del deporte y la cultura, entre ellos el citado medallista paralímpico.
A lo largo de su paso por los Juegos Paralímpicos de París 2024, el Príncipe Heredero vio competiciones de rugby en silla de ruedas, badminton y tenis de mesa. Saludó también a Daniel Wagner, que logró una plata para Dinamarca en salto, visitó la Villa Olímpica y conoció las instalaciones, y por supuesto se quedó a comer allí con los atletas. Finalizado su paso por París, regreso a Dinamarca para ultimar los detalles para su viaje a África Oriental, donde le espera una nueva vida, al menos por un tiempo.