Parece que la pesadilla que está viviendo Charlene de Mónaco empieza a llegar a su fin. Tal y como ella misma ha hecho saber a través de una entrevista de radio en la emisora Sudáfrica Radio 702, tendrá que recibir un nuevo tratamiento médico para la infección otorrinolaringológica que lleva padeciendo desde hace meses y que le impide salir del país. Un nuevo paso en su recuperación que le permitirá -espera- poder regresar al Principado de Mónaco el próximo mes de octubre y por fin volver a reunirse con sus hijos y su marido.
La exdeportista aseguró durante la entrevista que se encuentra bien y que es consciente de que el proceso de recuperación es mucho más lento de lo que le gustaría: " Se necesita tiempo para abordar el problema que estoy teniendo ", informó: " No puedo forzar la curación, así que estaré en Sudáfrica hasta finales de octubre ". Una fecha en el calendario que seguramente tendrá todo este tiempo muy presente para poner fin a la separación forzosa de su familia.
Lo que menos se esperaba Charlene de Mónaco cuando ponía rumbo a su país natal el pasado mes de mayo de 2021 que ese viaje sería, por el momento, solo de ida. Tal y como se ha ido pudiendo saber a lo largo de estos meses por boca de la propia Princesa, esta se había realizado una elevación en el seno maxilar -operación previa a la colocación de un implante bucal- antes de viajar a Sudáfrica, sin ser consciente de que tenía una infección.
Volverá a Mónaco a finales de octubre
Esto no ocurrió hasta que, ya en el país africano, comenzó a sufrir fuertes dolores en los oídos ocasionados por esta fuerte infección. Una enfermedad que, pese a ser respiratoria, afectó de forma considerable también a sus oídos, motivo que le ha obligado a permanecer en su país natal ante la imposibilidad de coger un vuelo. Tal y como ella misma explicó también, la presión que suelen sufrir los conductos auditivos a la hora de tomar un vuelo sería muy peligroso para ella pudiendo solo elevarle a 6.000 metros de altura, una altura muy inferior a la que alcanza cualquier tipo de avión para un viaje de larga distancia.
Pero durante estos complicados meses Charlene de Mónaco no ha estado siempre alejada de su familia. A pesar de su imposibilidad de moverse del país, ha sido su marido el Príncipe Alberto de Mónaco y sus dos hijos gemelos, Jacques y Gabriella, los que se desplazaron hasta allí en varias ocasiones. Cuando desgraciadamente les toca estar separados, tal y como ha mostrado la propia Princesa a través de sus redes sociales, tiene comunicación diariamente a través de videollamada para estar lo más cerca los unos de los otros.