Lo bueno que trae esta operación no es solo que se vayan solucionando sus problemas de salud, sino que como ha anunciado también Palacio Grimaldi, el Príncipe Alberto y sus hijos, el Príncipe Jacques y la Princesa Gabriella, viajan a Sudáfrica para estar con la Princesa Charlene durante su convalecencia. Podrán estar nuevamente reunidos durante una temporada, lo que sin duda ayudará a la Princesa de Mónaco si no a recuperarse más rápidamente a nivel físico, sí a encontrarse mejor a nivel anímico al tener al lado a su marido y a sus hijos, a los que echa terriblemente de menos.
Todo comenzó debido a una intervención dental. La Primera Dama de Mónaco pasó por quirófano para una elevación del seno maxilar para poder colocarse un implante que necesitaba. Viajó a Sudáfrica sin saber que este procedimiento le provocó una tremenda infección. Ante el dolor, consultó al médico y comenzó un tratamiento para terminar con esta enfermedad que le impide volver a Mónaco en avión debido a que la presión de sus oídos no se igualaría y no podría soportar un vuelo. La propia la Princesa Charlene ha señalado que espera regresar a Mónaco en octubre de 2021. Mientras tanto, son el Príncipe Alberto, el Marqués de Baux y la Condesa de Carladès los que vuelan a Sudáfrica para estar con ella.