La Reina Isabel y el Duque de Edimburgo permanecen confinados en su Castillo de Windsor y sin fecha de vuelta a Londres. Y dado que ni ellos ni nadie pueden usar los jardines del Palacio de Buckingham -la pandemia ha cancelado cualquier tipo de acto y fiesta allí-, la Monarca ha accedido a la petición de Boris Johnson para poder correr de forma segura allí.
Tras haber dado positivo en coronavirus, la salud del político se vio muy deteriorada, por lo que se optó por llevarlo al hospital St. Thomas de Londres. Allí permaneció una semana ingresado, y varios de esos días en la UCI, una experiencia que le hizo replantearse por completo su vida.
Ya completamente recuperado y tras haberse convertido en padre por quinta vez -su primer hijo junto a su prometida Carrie Symonds-, Boris Johnson ha decidido iniciar una nueva vida, una vida sana y en la que espera dejar atrás varios kilos. Y para ello, aunque ya era aficionado al running, se ha puesto muy firme con el deporte y la vida healthy.
Boris Johnson inicia una nueva vida tras el coronavirus
Antes del confinamiento se le podía ver haciendo deporte por St. James, pero ahora sus asesores han determinado que eso no es seguro, por lo que el Primer Ministro se ha puesto en contacto con la Reina Isabel para pedirle poder correr por los jardines del Palacio de Buckingham.
Por supuesto, la Monarca ha accedido y de ahí que se haya podido ya ver a Boris Johnson llegando con su vehículo hasta el Palacio en ropa deportiva para llevar a cabo su entrenamiento diario. "El Primer Ministro ha estado haciendo ejercicio en los terrenos del Palacio de Buckingham. Obviamente es importante que el Primer Ministro pueda hacer ejercicio", ha confirmado una fuente a The Times.