El Príncipe de Gales cenó con su equipo en un restaurante de Varsovia que supone un lugar seguro para las personas LGTBI, a quienes las autoridades de Polonia han colocado en la diana.
La Casa Real Británica sorprendió al anunciar la visita oficial del Príncipe Guillermo a Polonia, que se dio a conocer con la menor antelación posible para garantizar su seguridad. El Príncipe de Gales se desplazó a Rzeszow, a pocos kilómetros de la frontera con Ucrania, donde agradeció personalmente a las tropas británicas allí destacadas su labor y expresarles el apoyo de la ciudadanía de Reino Unido.
Posteriormente viajó a Varsovia para realizar una ofrenda floral ante la Tumba del Soldado Desconocido, donde siguió los pasos de la Reina Isabel y el Duque de Edimburgo, que hicieron lo mismo en su Visita de Estado a Polonia en 1996. El Príncipe de Gales pasó por un centro de acogida de refugiados ucranianos para conocer lo que han sufrido y cómo se encuentran en Polonia. Durante la visita oficial, el Príncipe Guillermo también se reunió con el Presidente de Polonia, Andrzej Duda, al que agradeció personalmente el apoyo, la generosidad y la hospitalidad que Polonia ha brindado a los ucranianos.Una forma de apoyar al colectivo LGTBI
Además de todo eso hubo tiempo para una cena no oficial, pero cargada de mucho significado. Sucedió en el Butero Bistro de Varsovia, que había recibido una reserva para 12 personas a nombre de una tal Daisy. Como señala Daily Mail, se suponía que Daisy iba a celebrar su cumpleaños, pero era solo una tapadera. La mesa era para el personal de la oficina del Príncipe de Gales que viajó con él. A ellos se quiso unir el propio Príncipe Guillermo, que se apuntó a la cena y se tomó un sandwich.
Un comensal se dio cuenta de la presencia del Príncipe de Gales, que dio cuenta del paso del heredero por este restaurante de Varsovia. El simbolismo del lugar elegido viene porque se trata de un restaurante que acoge bien a la comunidad LGTBI, que ha visto cómo las autoridades polacas quieren restringir sus derechos y libertades.
Mientras la Unión Europea en su conjunto camina hacia una mayor inclusión, libertad y diversidad, países como Polonia y Hungría buscan criminalizar al colectivo LGTBI. En lugares como el citado restaurante, que se anuncia como un espacio queer con comida reconfortante, que tiene como logo los colores del arcoíris y que ofrece noches de karaoke con drag queens, se busca crear un espacio seguro para las personas LGTBI, que no lo tienen fácil en Polonia.
El Príncipe Guillermo, que ha expresado públicamente su apoyo a las personas LGTBI, quiso hacerlo también de esta forma en Polonia: "Es valioso que haya respaldado a la comunidad a la que no apoyan las autoridades en Polonia", señaló una fuente al citado medio.