SITUACIÓN DELICADA

La Casa Real Noruega lanza un comunicado sobre la salud de la Princesa Mette-Marit en medio de la polémica por Marius Borg

La situación de la Casa Real de Noruega y, concretamente, la de Mette-Marit no es la más sencilla a raíz de todas las polémicas de su hijo mayor.

Raquel Alonso Sánchez 12 Octubre 2024 en Bekia

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La Princesa Mette-Marit se encuentra atravesando un momento bastante complicado a raíz de la delicada polémica en la que se ha visto envuelto su hijo mayor, Marius Borg, quien fue detenido por agresión a una pareja y del que no dejan de salir informaciones que le dejan en un lugar pésimo, como sus altas posesiones de droga o la destrucción de su móvil al haber sido avisado de que le iban a detener.

Esta situación no es nada fácil para cualquier madre pero, menos aún, si eres la Princesa de Noruega, pues te encuentras en el centro de todas las miradas. La Princesa ha continuado con los actos que tenía previstos pero ahora la Casa Real ha emitido un comunicado que también resulta ciertamente preocupante pues pone el foco en el estado de salud de Mette-Marit.

Fue en el año 2018 cuando la futura Reina anunció que sufría "una variante inusual de fibrosis pulmonar", que se basa en la inflamación, endurecimiento y cicatrización de una parte del tejido pulmonar. Este proceso provoca que la función respiratoria se deteriore de forma lenta, pero progresiva. Ahora, Mette-Marit va a reanudar el tratamiento y es probable que cancele alguno de sus actos.

El comunicado de Casa Real

Casa Real Noruega ha emitido un comunicado en el que dice lo siguiente: "Su Alteza Real la Princesa Heredera Mette-Marit ha reiniciado el tratamiento para su enfermedad pulmonar crónica. La experiencia anterior ha demostrado que los medicamentos pueden provocar efectos secundarios que pueden tener consecuencias para el programa oficial de la Princesa Heredera", decía el comunicado.

Tras esto, concluía diciendo: "Por lo tanto, nos parece natural compartir esta información esta vez". Está claro que se trata de una enfermedad que puede ocasionar muchos problemas a Mette-Marit y han considerado que es oportuno avisar de ello pues, además, le puede servir para estar alejada de algún acto en un momento en el que por toda la polémica con su hijo lo último que le puede apetecer es dar la cara públicamente.

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