Después llegó el tenista Guillermo Vilas, con el que Carolina tuvo un affaire. Antes de encontrar al amor de su vida salió con Roberto Rossellini Jr, hijo de los legendarios actores Roberto Rossellini e Ingrid Bergman. Después llegó Stefano Casiraghi, millonario italiano con el que se casó en 1983 y que le dio a sus tres hijos mayores, Andrea, Carlota y Pierre, asà como los años más felices de su vida. Todo se rompió cuando en 1990 el italiano morÃa en un accidente náutico.
Los amores de Carlota Casiraghi
En su vida personal, la amazona ha llevado un camino similar a su madre, y por el momento parece estar cometiendo los mismos errores que ella, siendo asà la que parece haber continuado con la legendaria maldición de los Grimaldi por la que no serán felices salvo que se casen pasados los 50 años. Carolina de Mónaco lleva 2 matrimonios fracasados y una relación frustrada por la muerte prematura de Stefano Casiraghi. Carlota comenzó muy pronto a salir con chicos, al igual que la Princesa de Hannover, aunque en su caso ha sido de relaciones largas y con hombres de mejor posición social.
Su primer amor fue el aristócrata austriaco Hubertus Herring Frankensdorf, con el que estuvo entre 2001 y 2002 y que no llevó a nada. Despues apareció Félix Winckler, hijo de un abogado belga con el que estuvo entre 2004 y 2006. Su gran amor podrÃa haber sido Alex Dellal, al que pronto metió en los Grimaldi, lo mismo que hizo en su momento Carolina de Mónaco con Junot para disgusto de sus padres. Al menos a él le aceptaron rápido y no se casaron a la primera de cambio. El chico era perfecto para ella y fueron felices, pero cuando parecÃa que caminaban hacia el altar tras 4 años juntos, volvió el escándalo. ParecÃa que era patrimonio de sus tÃas Carolina y EstefanÃa, pero lo cierto es que a ella no se le dio nada mal. Un nuevo ejemplo de que volvió a caer en los errores maternos.
La amazona fue relacionada con Gad Elmaleh, y lo cierto es que sÃ, estaban juntos. De nuevo un actor, un galán más bien feo que podrÃa recordar la relación de Carolina con Vincent Lindon. A mamá Carolina no le hizo ninguna gracia perder como yerno a un Dellal, sobre todo por lo bien que se llevaba tanto con él como con su familia polÃtica, y menos por un cómico 15 años mayor que su niña, separado, con un hijo y con una vida tan inestable. De tal palo, tal astilla.
Al final le acabó aceptando y se convirtió en un Grimaldi más. La fertilidad de Carolina de Mónaco se volvió a repetir; dos veces se casó ella embarazada, asà que no sorprendió que Carlota Casiraghi se quedara en estado de gestación cuando llevaba poco más de un año con Gad Elmaleh. Con lo que quizás no contaba la hermana de Alberto II es con que su hija no se casara. Finalmente, la Casa Principesca anunció el nacimiento de Raphaël el 17 de diciembre de 2013, un bebé nacido fuera del matrimonio que no entrarÃa en la lÃnea de sucesión al Trono. La propia Carlota fue declarada ilegÃtima por El Vaticano hasta que finalmente declaró nulo el matrimonio de su madre con Philippe Junot y se legitimó a los 3 Casiraghi. En el caso de Raphaël, sus posibilidades de subir al Trono son tan nulas, que a Carlota Casiraghi le ha dado igual.
La paz llegó por fin a la vida sentimental de Carlota Casiraghi, consiguiendo una estabilidad que ya hubiera querido su madre. Sin embargo, todo saltó por los aires en otoño de 2015 cuando fue fotografiada paseando muy enamorada con el director italiano Lamberto Sanfelice. Dejó ParÃs, pasó el tiempo entre Mónaco y Roma, volvió a convertirse en el centro de todas las miradas y habladurÃas, y metió en la familia a Sanfelice, a quien Carolina de Mónaco ha tenido que aceptar. Al borde de los 30, quizás sea este el definitivo, con quien se case, tenga más hijos, y siguiendo la estela de su madre, de quien se separe irremediablemente. El tiempo dirá cuántos errores más sigue cometiendo Carlota Casiraghi para seguir pareciéndose todavÃa más a la Princesa Carolina de Mónaco.