Parecía que no iba a llegar nunca, pero por fin hay fecha para la esperada boda de Carlota Casiraghi y Dimitri Rassam. A falta de una confirmación oficial desde Palacio Grimaldi que no va a llegar, teniendo en cuenta que no se informa demasiado sobre cuestiones personales de los hijos de Carolina de Mónaco, ya hay anuncio oficioso.
La revista Bunte ha señalado que habrá dos bodas. La primera de ellas, la civil, será el primer fin de semana de junio, y la segunda y última, la religiosa, tendrá lugar el último fin de semana de junio de 2019, cuando el productor ya sea un hombre completamente libre después de finalizar los trámites de su divorcio con Masha Novoselova.
No se conocen muchos detalles más allá de que la Princesa de Hannover está tan emocionada que está supervisando todos los detalles del enlace con el máximo secretismo. Se entiende que cuenta con el beneplácito de la pareja de novios. Por otro lado, en el cortejo nupcial participarán el hijo de Carlota Casiraghi y la hija de Dimitri Rassam, a los que podrían unirse los mellizos Jacques y Gabriella de Mónaco, primos de la contrayente, o los hijos de Andrea y Pierre Casiraghi, que son otros 5. El baby boom real monegasco ha provocado que pueda haber un numeroso cortejo para la boda.
Lo habitual sería que ese primer fin de semana de junio la boda civil se celebre en el Palacio Grimaldi, que el Príncipe Alberto abre gustosamente para que sus sobrinos contraigan matrimonio. Antes de que acabe el sexto mes de 2019, su unión sería bendecida por la Iglesia, lo que podría llevar a la pareja a la isla de Pantelaria (Italia), en la que Carole Bouquet, madre del novio, tiene una propiedad.
Dos años de amor y un hijo
El romance entre Carlota Casiraghi y Dimitri Rassam saltó a la luz en marzo de 2017. Un año más tarde se conoció que se habían prometido, y siete meses después, en octubre de 2018, vino al mundo su primer hijo en común, Balthazar. Enero de 2019 llegó con el anuncio de una ruptura que fue tan falsa que la pareja emitió un comunicado para negar su separación. Ahora la noticia es bien distinta, y tras una larga espera, por fin habrá boda.