Londres se prepara para despedir a la Reina Isabel II de Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte. Después de los homenajes que tuvieron lugar en Edimburgo, el féretro de la Monarca más longeva de la historia del país fue trasladado hasta la capital para llevar a cabo una capilla ardiente en el Gran Salón del Palacio de Westminster en la que todo el pueblo británico pudiera presentarle sus respetos durante cuatro días. Las kilométricas colas de ciudadanos, en las pudieron verse a personalidades como David Beckham, se interrumpieron en la tarde del viernes 16 de septiembre para la Vigilia de los Príncipes, uno de los actos centrales para homenajear a la Soberana.
Al igual que hicieron en la Catedral de St Giles de la capital escocesa, el Rey Carlos III y sus hermanos, los príncipes Ana, Eduardo y Andrés, asistieron hasta el emblemático e histórico Salón del Parlamento británico para velar el cuerpo de su madre en la Vigilia de los Príncipes, colocándose cada uno de ellos en unos de los extremos del catafalco. El origen de este acto se remonta a 1936, cuando Eduardo VIII, Alberto de York, Enrique de Gloucester y Jorge de Kent también hicieron guardia junto al féretro del Rey Jorge V en el Palacio de Westminster, lo cual también se repitió en el fallecimiento de la Reina madre en 2002 por parte de sus nietos.
Ana rompe la tradición y Andrés viste uniforme
La Vigilia de los Príncipes se llevó a cabo con escasa presencia de público, ya que durante los 15 minutos en que se desarrolló no podían acceder ciudadanos al interior de Westminster Hall, por lo que solo estaban aquellos que hubieran entrado hasta ese instante. A diferencia de otros actos anteriores, los cuatro hijos de Isabel II vestían uniforme militar, incluido también el Príncipe Andrés, a quien le ha sido otorgado un permiso especial para este momento en concreto, el cual no obtuvo para la misma vigilia realizada en Edimburgo. Hay que recordar que, debido al escándalo de abuso sexual en el que se ha visto involucrado, en enero de 2022 la Reina despojó al que siempre ha sido su hijo favorito de sus puestos militares honorarios, como el de coronel de las Guardias Granaderas, y del título de Alteza Real.
Carlos III y sus hermanos llevaron a cabo la Vigilia de los Príncipes en Westminster HallPor su parte, la Princesa Ana ha vuelto a romper la tradición y nuevamente se ha unido a sus hermanos para la Vigilia de los Príncipes, como así hizo en la escocesa Catedral de St Giles. Hasta entonces, este solemne acto no había contado nunca con la participación de las mujeres de la realeza, pero ella ha decidido acabar con esta costumbre tan machista y rendir homenaje a su madre. La hija de Isabel II apenas se ha separados del féretro desde que se anunciase el fallecimiento el 8 de septiembre de 2022, siendo la que le ha acompañado en sus traslados desde el Castillo de Balmoral hasta Edimburgo, y posteriormente desde la capital de Escocia hasta Londres.
Junto con el reducido número de ciudadanos que estaban congregados en el interior del Gran Salón del Palacio de Westminster, también se pudo ver a varios componentes de la Familia Real, ocupando un lugar privilegiado y encabezados por la Reina consorte Camilla, que conforme avanzan los días desde el fallecimiento de Isabel II va adquiriendo el protagonismo propio de su nueva posición. Entre los familiares, se pudo ver a la Condesa de Wessex, esposa del Príncipe Eduardo, o Timothy Laurence, marido de la Princesa Ana. Del mismo modo, destacó también la presencia del Duque de Kent, primo de la difunta Reina.
Los nietos de Isabel II también le dedicarán una vigilia
Antes de que tenga lugar el funeral de estado en la Abadía de Westminster, varios nietos de la Reina Isabel II también montarán guardia junto al féretro. Esta vigilia tendrá lugar el sábado 17 de septiembre por la noche y reunirá al Príncipe Guillermo de Gales y su hermano Harry, las princesas Beatriz y Eugenia de York, Zara y Peter Phillips -hijos de la Princesa Ana-, y Lady Louise Windsor y James -hijos del príncipe Eduardo-. Esta reunión familiar para homenajear a la Monarca fallecida será una estampa extraordinaria, pues será la primera vez que se vea a los ocho nietos juntos desde su muerte.
