La Reina Letizia viajó hasta Burgos, en la que es su primera visita como Reina a la ciudad castellana y lo hizo para presidir un acto institucional de la Asociación Española Contra el Cáncer. A su llegada al Fórum Evolución Palacio de Congresos y Auditorio fue recibida por un grupo de jóvenes y niños que le mostraron el tradicional baile de los danzantes y tetines de la ciudad.
Disfrutó de estos momentos musicales en compañía del presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera; el alcalde burgalés, Javier Lacalle; e Isabel Oriol. La Reina, que siempre ha estado muy comprometida con la enfermedad y que lleva cinco años como Presidenta de Honor de la organización, destacó que la AECC siempre estará al lado de la sociedad española. Durante su discurso explicó: "Me siento muy afortunada de formar parte de una asociación que, como yo constato, funciona".
También hizo mención a su viaje a Washington y a las ideas conseguidas por la presidenta de la asociación, Isabel Oriol, durante la visita al Nacional Institutes of Health. Durante este acto, también se hizo entrega de las ayudas a la investigación 2015 para seguir luchando contra esta enfermedad y hacer más fácil la vida a todas aquellas personas que la padecen y de los familiares.
En este acto, Doña Letizia llegó vestida de 'total red', uno de sus colores favoritos y también uno de los más utilizados en sus apariciones. Se trata de un conjunto dos piezas, de falda y chaqueta sin mangas y abotonada. En la Embajada Española de México ya se dejó ver con este favorecedor modelo.
La Reina Sofía, contra el Sida
Al otro lado de España, la Reina Sofía se desplazó el pasado martes en visita privada hasta Marbella tras haber inaugurado el III Congreso Internacional de Investigación e Innovación en Enfermedades Neurodegenerativas en Málaga. Junto a María Luisa de Prusia, Doña Sofía se acercó hasta la sede de la Asociación Concordia Antisida, situada en la localidad de San Pedro de Alcántara, y pudo ver de primera mano la labor que su pariente, directora de esta ONG, realiza para ayudar a los enfermos de Sida.
Posteriormente la Reina Sofía disfrutó de un almuerzo en la intimidad de la residencia de la Princesa María Luisa de Prusia y su esposo, el Conde Rudy Schomburg, al que acudieron solamente siete personas. Allí, la madre del Rey pudo hablar tranquilamente con su prima María Luisa, a la que puede frecuentar más desde que ya no es la Reina de España.