Los Juegos Invictus han llegado a su fin y para cerrar la ceremonia el Príncipe Harry ha asistido al partido final de baloncesto en silla de ruedas, que enfrentaba al equipo estadounidense y al equipo holandés. Durante el evento, el Príncipe ha tenido un encuentro muy agradable con el Rey Guillermo Alejandro de Holanda. Ambos han estado animando a los equipos que disputaban la final y se han mostrado cómodos, compartiendo bromas y riéndose, un momento que han vivido junto con el presidente de la ceremonia, Mart De Kruif.
Antes de entrar al partido, el Rey de Holanda y el Príncipe se han visto fuera del recinto Zuiderpark, donde ha tenido lugar la final. Al terminar el partido, en el que Estados Unidos ha sido el campeón, el Rey Guillermo ha saludado a todos los jugadores del equipo holandés y les ha entregado las medallas de plata. Por su parte, el Duque ha entregado las medallas de oro al equipo estadounidense. No eran los únicos miembros de la realeza presentes, la Princesa Margriet y su hijo el Príncipe Pieter-Christiaan, que también han estado en la final.
Tras el final de las competiciones, el Rey Guillermo de Holanda ha hablado con todos los atletas holandeses del equipo Invictus sobre las experiencias que han vivido. Además, ha tenido lugar la ceremonia de clausura, un final que el Rey no se ha querido perder. Allí, el Príncipe Harry y el Comandante de las Fuerzas Armadas han dado unos discursos agradeciendo a los deportistas, a sus familias y a la organización. Unas palabras que han servido para cerrar una competición que en 2023 será acogida por Alemania.
Una ceremonia previa
Antes de asistir al último partido de baloncesto en silla de ruedas, el Rey Guillermo y la Reina Máxima han inaugurado los Juegos del Rey, que tienen lugar desde 2013. Este año han podido celebrar el tradicional desayuno saludable del evento, que se había tenido que suspender en 2021 a raíz de la pandemia. En esta ocasión han sido los propios Reyes los que han querido formar parte de lo organizado por las escuelas y han participado en distintas actividades con los niños.
La Reina ha optado por vestir elegante pero cómoda, consciente de que podía participar en alguno de los juegos. Durante la inauguración, se le ha podido ver sonriente y cómoda e incluso ha boxeado con una de las niñas presentes en el evento. También ha querido probar el tiro con arco, algo en lo que el Rey no se ha quedado atrás, participando junto con su mujer. Así, con esta ceremonia que se ha completado con un discurso, se han dado comienzo a los Juegos del Rey en Delft.