Galería: La Familia Real Jordana en imágenes
Máxima de Holanda es toda una reina... consorte. En las Monarquías suele haber una pareja reinante, y mientras el o la titular ostenta la Jefatura del Estado y tiene más cuestiones institucionales que atender, su consorte puede dedicarse también a temas sociales e internacionales más allá de los viajes oficiales en los que priman las relaciones bilaterales y diplomáticas.
De este modo, Máxima de Países Bajos se desplazó a Jordania como asesora especial del secretario general de la ONU, cargo que ejerce desde 2009 y que en esta ocasión le ha llevado al país árabe. Allí pasó por el centro de refugiados sirios Princesa Basma, donde conoció los problemas a los que se enfrentan. También mantuvo una reunión en la oficina de la ONU para conocer de primera mano la situación económica del país y buscar las mejores soluciones para superar los problemas financieros.
La Reina Máxima comentó que aunque las cosas iban bien, todavía se puede hacer más, por ejemplo la creación de cuentas bancarias informáticas. Abrir una cuenta no es tan sencillo como en otros países, algo en lo que el país debe mejorar. Asimismo, se interesó por proyectos para mujeres, jóvenes y refugiados, los colectivos más vulnerables en Jordania.
La consorte del Rey Guillermo Alejandro se acercó al Banco Central de Jordania para charlar con su presidente, Ziad Fariz, sobre lo que ha visto durante su visita y para proponer soluciones, hablando de financiación inclusiva. Como colofón, se desplazó al Palacio Real de Amman para reunirse con los Reyes de Jordania.
Reunión de royals
Allí hubo el siempre esperado duelo de estilo entre royals. Abdalá de Jordania estaba correcto con un traje al que dio una nota de color con el rojo de su corbata, pero las que verdaderamente llamaron la atención fueron las reinas. Máxima de Holanda portó un abrigo largo oscuro y un vestido de Giambattista Valli estampado de topos en color morado que se alterna con otro estampado distinto en la falda. Su original look ganó al de la Reina Rania, que fue más clásica con una blusa negra y falda denim con dos cinturones incorporados.
La Reina Máxima hizo gala de su espontaneidad natural al encontrarse con los Reyes de Jordania y mostró la mejor de sus sonrisas a la pareja real, a la que le hizo ilusión ver. Saludó a Abdalá y a Rania con dos besos y después posaron para una foto. Posteriormente tuvieron tiempo para mantener una reunión y ponerse al día no solo de los objetivos y conclusiones de la visita de la consorte neerlandesa, sino también de otros asuntos de su interés. No se veían desde marzo de 2018, cuando Abdalá y Rania de Jordania realizaron una visita oficial a Países Bajos, por lo que tenían mucho que contarse.