Muchos de ellos probablemente poco o nada tengan que ver con los círculos de la realeza, pero una gran mayoría sin duda estará formada por las ramas familiares más cercanas a la Casa Real: los Gómez-Acebo, los Zurita y los Borbón-Dos Sicilias. Hay otras ramas mucho más lejanas - y prolíficas - pero que sin embargo están muy presentes tanto en la crónica social como en el mundo de los negocios. Es el caso de los Borbón-Sevilla.
Los Borbón-Sevilla tienen su origen en el Infante Enrique de Borbón y Borbón-Dos Sicilias: hijo del Infante Francisco de Paula y por tanto nieto del Rey Carlos IV, sobrino del Rey Fernando VII y primo hermano de la Reina Isabel II. Se le otorgó el título de Duque de Sevilla y, a pesar de que su descendencia quedó excluida de la Línea de Sucesión al Trono por haber contraído matrimonio morganático, a día de hoy siguen tan presentes en la Corte española como en el siglo XIX.
Los Borbón y Hardenberg
El Duque de Sevilla nació en 1943 y tras licenciarse en Económicas ha desarrollado una importante carrera empresarial, sobre todo en el sector de las finanzas. En su currículum destaca su trabajo en prestigiosas entidades como el banco londinense Hill Samuel, el Banco de Vizcaya (BBVA) o el International Bank of Miami. Posteriormente dejaría a un lado las finanzas y se volcaría junto a su hermano, Alfonso de Borbón y Escasany, en los negocios inmobiliarios de la familia. Es además presidente del Real Cuerpo de la Nobleza del Principado de Asturias y Gran Maestre Emérito de la Orden de San Lázaro de Jerusalén.
En 1973 se casó con la condesa alemana Beatriz von Hardenberg zu Fürstenberg, emparentada con los principales apellidos de la aristocracia centroeuropea (era prima del Príncipe Alfonso de Hohenlohe) y conocida sobre todo por haber sido la creadora en los años 80 de la edición española de la revista Vogue. Gracias a ello se convirtió en una imprescindible de la industria de la moda española y mecenas de diseñadores hoy reputados como Ágatha Ruiz de la Prada, Francis Montesinos o Adolfo Domínguez.
Se divorciaron en 1989 y el Duque de Sevilla ha estado casado en dos ocasiones más desde entonces (de 1991 a 1993 con Isabelle Eugénie Karanitsch y desde el año 2000 con María de los Ángeles de Vargas-Zúñiga). Con sus siguientes esposas no tuvo hijos, por lo que los descendientes de esta rama familiar son los hermanos Borbón Hardenberg.
La mayor y sin duda más conocida de los tres es Olivia de Borbón. Estudió Arte Dramático en Nueva York e intentó hacer carrera como actriz, pero lo máximo a lo que llegó fue a concursar en el reality 'La granja de los famosos' (2004) de Antena 3. Allí vivió un romance con el también concursante Alonso Caparrós y, aunque no se alzó con el premio, sí consiguió lo que buscaba: notoriedad. A partir de entonces Olivia de Borbón se convirtió en it-girl e invitada VIP en todas las fiestas de Madrid, así como en imagen publicitaria de la marca de joyas Aristocrazy.
Al margen de su efímera historia con Caparrós, su relación amorosa más larga fue con Sebastián Palomo Danko (hijo del torero Palomo Linares), con quien estuvo de 2007 a 2011. Le siguió un fugaz romance con el actor Diego Osorio y finalmente la estabilidad hallada con el empresario manchego Julián Porras. Con este último se casó en 2014 y junto a sus dos hijos - Flavia y Fernando - forman una familia que frecuenta las páginas de las revistas.
La mediana de los tres hermanos era Cristina de Borbón, poco conocida por el gran público pero considerada la más rebelde de la familia. Podría decirse que era más hippie que royal. Estudió Relaciones Internacionales y trabajó como traductora, pero decidió dejarlo todo por su verdadera pasión: la cocina. Tras aprender con reconocidos chefs de Madrid, París y Nueva York, creó su propia empresa de catering. Nunca se casó y vivía volcada en su trabajo y en sus sobrinos hasta que el 13 de febrero de 2020 falleció de manera totalmente inesperada a los 44 años tras haber sufrido un accidente.
El más pequeño de la familia es Francisco de Paula de Borbón y Hardenberg, nacido en 1979 y llamado a heredar el título de su padre. Estudió Gestión Deportiva y, aparte de estar involucrado en los negocios inmobiliarios de su padre y de su tío, posee su propia empresa dedicada a la proyección, diseño y construcción de complejos deportivos: Asap Sports China SL.
Los Borbón y Yordi
El Duque de Sevilla tiene un único hermano con quien tan solo se lleva dos años de diferencia. Se trata de Alfonso de Borbón y Escasany, cuyo perfil mediático es todavía menor al de su hermano mayor. Es más, podría decirse que solo se le ve cuando es estrictamente necesario y únicamente en eventos de carácter familiar: bodas, bautizos, funerales o cumpleaños. Su lugar han sido siempre los despachos y los consejos de administración.
Estudió Derecho y, mientras que su hermano se especializó en el sector de las finanzas, Alfonso de Borbón prefirió el sector inmobiliario y el de los seguros. Con el tiempo los dos acabarían volviéndose socios y actualmente los Borbón y Escasany comparten la propiedad de dos empresas inmobiliarias - Ahorro Familiar S.A. y Keka Socimi S.A. - y ejercen como consejeros de la filial española de la compañía de seguros AXA.
Quien sí se deja ver en los principales eventos de Madrid y durante un tiempo era habitual en la lista de mujeres más elegantes de España es su esposa: Marisa Yordi (conocida como Marisa de Borbón). No en vano, su nombre ha estado siempre vinculado a la prestigiosa firma Loewe en calidad de relaciones públicas. Su trabajo consistía, según ella misma reveló en una entrevista para El Mundo, en "enseñar la colección a las clientas especiales, asesorarlas y colaborar en la organización de los eventos y el marketing". Gracias a esto consiguió crear un círculo de amistades de lo más selecto y en el que se encuentran Isabel Preysler, Cari Lapique, Naty Abascal o Jaime de Marichalar.
La menor de sus dos hijos, Alejandra de Borbón, decidió seguir los pasos de su madre y desde 2012 ostenta el puesto de Directora Global de Relaciones Públicas de Loewe. Una apuesta inteligente por parte de la marca para mantener su esencia y adaptarse a los nuevos tiempos. Antes de eso, Alejandra trabajó como periodista freelance en publicaciones de prestigio en el sector de la moda como Marie Claire o Vogue. En lo que respecta a su hermética vida privada, lo único que se sabe es que de 2008 a 2019 estuvo casada con Bosco Ussía (hijo del periodista Alfonso Ussía) y que tiene dos hijos mellizos: Santiago y Tristán.
Alfonso de Borbón y Yordi es el otro hijo del matrimonio. Al igual que su hermana es muy receloso de su intimidad, pero a su pesar se ve expuesto a los medios debido a la fama de su pareja: la modelo Eugenia Silva. Empezaron su relación en 2007 y en 2009 llegó la ruptura, pero tras idas y venidas por parte de ambos volvieron a darse una segunda oportunidad en 2013 y desde entonces forman una pareja estable con dos hijos: Alfonso y Jerónimo.
Durante su juventud, Alfonso tuvo fama de ser bastante mujeriego y se le relacionó con la también modelo Cristina Tosio. Desde que es padre de familia ha sentado cabeza y vive dedicado a los negocios: primero en el sector de las telecomunicaciones (en empresas como Teleconnect o Cobra Sky) y posteriormente en las empresas familiares de los Borbón Escasany junto a su padre, su tío y su primo.
La otra Elena de la familia Borbón
El Duque de Sevilla, su hermano y sus respectivas familias son los miembros más representativos de la rama de los Borbón-Sevilla. Pero no son ni de lejos los únicos. Igual de famosa que ellos fue en su día su prima hermana: Elena Barucci de Borbón (conocida como Elena de Borbón). Hija del aristócrata italiano Rinaldo Barucci y de Isabel de Borbón y Borbón (tía paterna de los hermanos Borbón Escasany), era también tataranieta del Infante Enrique e igualmente prima en cuarto grado del Rey Juan Carlos.
Tal y como cuenta la periodista Beatriz Cortázar: "Hubo un tiempo, a finales de la década de los 80, que cada vez que se escribía o hablaba de Elena de Borbón había que aclarar si se trataba de la primogénita de los Reyes o de quien fue la relaciones públicas de Gianni Versace". Y es que Barucci fue la encargada de introducir a la marca italiana en España y de ejercer de relaciones públicas de la misma hasta poco después del asesinato de Gianni Versace. A ambos los unía una gran amistad más allá de lo profesional, pero no ocurría lo mismo con Donatella Versace, quien según las malas lenguas no soportaba a Elena de Borbón.
Durante los años 80 y 90 acaparó portadas y listas de la elegancia, no solo por su estilo personal o su trabajo, sino también por su matrimonio con el empresario José Miguel Garrigues Walker (miembro de una destacada saga de banqueros y políticos). Lamentablemente, con tan solo 50 años le diagnosticaron Alzheimer precoz y progresivamente fue retirándose de la vida pública. Tras 15 años de reclusión en su casa, finalmente falleció en 2015 a los 68 años.
El periodista Juan Balansó le dedicó un capítulo en su libro 'La Familia Real y la familia irreal' (1992), en el que cuenta que Elena solicitó en 1976 poder invertir el orden de sus apellidos para que primase el Borbón. Por aquel entonces esta práctica no estaba legislada y el Consejo de Estado fue contundente en su negativa: "El apellido Borbón, en cuanto propio de la Casa Real española, es una institución nacional cuya extensión o relaciones de parentesco no debe tolerarse error alguno (...). Es evidente la trascendencia económico-social que estas confusiones pudieran alcanzar y la inconveniencia de poner en relación a la Familia Real (...) con las relaciones privadas o empresariales".
Lo que el Consejo de Estado venía a decir era que se desaconseja la utilización para fines lucrativos del apellido Borbón en personas a las que no les corresponda. Es el caso de Elena Barucci, Marisa Yordi o Beatriz von Hardenberg; a quienes se ha tratado siempre como Elena de Borbón, Marisa Yordi o Beatriz de Borbón. En su libro, Juan Balansó las define como "casos flagrantes de Borbones al bies, o de consortes que suprimen ingeniosamente el propio apellido para utilizar en sus relaciones laborales y sociales únicamente el de su borbónica media naranja".
Al final podría continuarse la lista de parientes de la Familia Real hasta completar los casi 700 borbones que contabiliza el INE. Pero, por suerte o por desgracia, las portadas del papel cuché y los consejos de administración no tienen sitio para todos ellos y los descendientes del Infante Enrique de Borbón han sabido posicionarse muy bien. Ya que el apellido no da de comer, habrá que ganarse el pan de la mejor manera que se pueda.