Galería: La Familia Real Española en imágenes
El Rey Juan Carlos salió de España el 3 de agosto de 2020 rumbo al exilio. La decisión fue tomada por el Rey Felipe ante los escándalos de su padre, que hacían insostenible permitir que no pasara nada mientras día tras día se conocían más actividades que dejaban en mal lugar al que había sido Rey de España durante 38 años. Juan Carlos I aceptó no sin antes resistirse mucho. Viajó a Sanxenxo el 2 de agosto de 2020, cenó con Pedro Campos y al día siguiente partió hacia Abu Dabi, lugar elegido como exilio temporal, o eso pensaba él. Allí se le esperaba con todas las atenciones en el Hotel Emirates Palace como huésped de lujo de la familia gobernante de este rico emirato, que tiene en gran estima a Juan Carlos de Borbón.
José Antonio Zarzalejos en la presentación de su libro 'Felipe VI. Un rey en la adversidad'Sobre este exilio ha hablado José Antonio Zarzalejos tanto en su libro 'Felipe VI. Un rey en la adversidad', como en la presentación del libro a la que acudió Bekia. Allí, hizo referencia a que no hay un plan para el regreso del Rey Juan Carlos a España y a lo complicado que resultaría alojarle en el país del que fue Jefe del Estado: "No puede ser en La Zarzuela, ni tampoco en una residencia de Patrimonio Nacional por razones obvias. Como ha sido Jefe del Estado tiene que ser en una residencia adecuada, aunque sea privada, y tiene que tener un sistema de seguridad también adecuado que preserve su intimidad. Por cierto, al Rey Emérito le preocupa enormemente su intimidad ".
Esa necesidad de salvaguardar su intimidad fue una de las razones por las que eligió Abu Dabi, donde vive un exilio dorado, que por muy aburrido que diga que se encuentra, o al menos eso deslizan sus amigos, está con todas las comodidades posibles. Su paso por el Emirates Palace fue efímero y no permanente. Solo estuvo unos días allí, ocupando posteriormente una residencia que no quiere ocultar al menos a sus allegados, a los que les envía fotos de lo que ve desde la casa en la que reside. "
El Rey Juan Carlos en Abu Dabi/ Foto: 'Viva de Vida'Tiene una escolta de cuatro agentes de la Guardia Real procedentes de la Guardia Civil y se van turnado por quincenas", asegura Zarzalejos, que añade el detalle que tienen las autoridades de Abu Dabi con su ilustre visitante: " Las autoridades emiratís le han asignado una seguridad adicional, sobre todo para evitar filtraciones a los medios de comunicación". Sobre eso ha contado cómo se las gastan en Abu Dabi para evitar precisamente filtraciones: "Un medio británico contactó a una agencia especializada en infiltrarse en terrenos complicados para extraer un reportaje de cómo vive Juan Carlos I en Abu Dabi. Los emiratís rápidamente detectaron a los reporteros y les pusieron en la frontera". Fue precisamente una imagen del Rey Juan Carlos, la emitida por 'Viva la vida' en la que se le ve en un muelle caminando apoyado por escoltas lo que provocó una enorme tensión en el país e hizo saltar las alarmas: "He sabido después que la filtración de la fotografía de Juan Carlos en un muelle acompañado de sus escoltas, porque él no quiere bajo ningún concepto aparecer en silla de ruedas, ha causado una cierta tensión en las autoridades de Emiratos porque ellos garantizan bajo cualquier concepto la intimidad ".
Rompió las normas dictadas por Felipe VI
Zarzalejos dice desconocer cómo se financia la estancia del Rey Juan Carlos en Abu Dabi, si bien se ha sabido que la seguridad española la paga Patrimonio Nacional: "No sé cómo se financia la estancia y si esa estancia está financiada por Emiratos es una donación en especie e infringiría las normas que el Rey ha establecido para los miembros de la Familia Real ".
De todos modos, el periodista recuerda que el padre ya rompió las normas impuestas por el hijo. En 2015 Felipe VI " prohíbe expresamente la aceptación de donaciones o de regalos. En los años 2016, 2017 y 2018, Juan Carlos I tiene que regularizar con Hacienda gastos que le son sufragados por donación de terceras personas pese que en 2015 había ordenado que los miembros de la Familia Real no se podían beneficiar de ningún tipo de donación y que los regalos solo podían ser de cortesía y que los institucionales iban a Patrimonio Nacional a ser evaluados por una comisión. Que los regalos que recibiesen dinerarios irían anónimamente a una institución de interés general, que no se podían aceptar herencias si no es a beneficio de inventario y que los préstamos que pudiesen recibir para financiar actividades particulares, no podían tener un interés menor a la media del mercado financiero. Rigiendo esas normas para la Familia Real desde enero de 2015, Juan Carlos siguió gastando de cuentas nutridas por terceras personas que tuvo que regularizar. ¿Está en sensatez cuando ha tenido lo que ha tenido, los escándalos que ha tenido y las normas que ha exigido su hijo? Caben las deducciones de esos testimonios de que el Rey tiene una mala percepción de la realidad", finalizó Zarzalejos.
