A las 11h ha dado comienzo la misa funeral en honor a la Reina de Inglaterra en la Abadía de Westminster siguiendo un estricto protocolo como en todo funeral de Estado. La entrada de Joe Biden junto a Jill Biden ha llamado la atención por no acudir rodeado de seguridad algo que, con toda probabilidad, no volverá a suceder nunca. Tras las altas autoridades europeas, han entrado los antiguos Primeros Ministros de Reino Unido, concluyendo con Liz Truss, actual Primera Ministra.
El féretro de la Reina Isabel II ha sido colocado en el catafalco y lucía flores procedentes de los palacios de Buckingham, Clarence House y Highgrove House, todas ellas escogidas por el Rey Carlos III. Se han guardado dos minutos de silencio nacional a las doce menos cinco antes de dar comienzo la misa en honor a la monarca. Es ahí donde se ha podido ver la colocación de los invitados, estando Felipe VI y la Reina Letizia junto al Rey Juan Carlos y la Reina Sofía.
Durante la liturgia se ha podido escuchar el salmo 42 en versión musical por expreso deseo de la Reina, así como un canto que se compuso para su coronación como Reina en el año 1953. También se ha podido escuchar el himno nacional y el sonido de las gaitas para finalizar con la misa. Tras esto, el féretro de la Reina Isabel ha comenzado la procesión por las calles del centro de Londres, seguido por el Rey Carlos III, muy emocionado, sus otros tres hijos y sus nietos. De cerca, el resto de la Familia Británica seguía el cortejo en coche.
Mucha emoción y gran protocolo
La Reina Isabel II ha recorrido las calles de Londres por última vez, dejando atrás el que fue su hogar, el Palacio de Buckingham y ha sido en el Arco de Wellignton, símbolo de la victoria napoleónica, donde se ha finalizado la larga procesión para dar paso al momento en el que el féretro se ha trasladado a un coche que le ha llevado hasta Windsor. Las calles estaban repletas de personas que querían despedir a su Reina, la que ha sido querida y alabada durante todos estos años.
Una vez en Windsor se ha producido un nuevo paseo, el 'Long Walk', con el féretro de la Reina Isabel II, esta vez en coche fúnebre, hasta la capilla de San Jorge, donde se ha celebrado una misa a la que han asistido diversos miembros de las Casas Reales europeas por expreso deseo del Rey Carlos III. Son 800 invitados los que han acudido a ese primer funeral público en Windsor para después, finalmente, ser enterrada en un acto privado en la capilla con sus seres queridos.