La Reina de Suecia utilizó un programa para que sus hijos comenzaran a aprender un idioma tan importante para su madre.
La Reina Silvia no ha dejado atrás sus raíces alemanas aunque lleve desde los años 70 del siglo XX viviendo en Suecia. La Reina le concede una gran importancia al idioma que formó gran parte de su infancia y de su adolescencia y, por ello, quiso que sus hijos, la Princesa Heredera, el Príncipe Carlos Felipe y la Princesa Magdalena también conocieran y aprendieran alemán.
Para ello, la Reina utilizó una táctica curiosa, ponerles a sus hijos un programa de teatro de marionetas para ayudarles a entender el idioma: "Había un programa de teatro de marionetas, y gracias a ello pude hablar alemán con nuestros hijos: el cocodrilo hablaba alemán, al igual que la princesa o Hansel y Gretel", explicó la Reina. Además, era un idioma que el Rey también entendía gracias a su madre alemana, por lo que en ocasiones hablaban este idioma en casa.El gran interés de la Reina Silvia por enseñar alemán a sus hijos viene heredado de su padre, Walther Sommerlath, que incluso cuando su familia se marchó a Brasil en 1947 siguió dándole mucha importancia a que todos hablaran alemán entre ellos, para no perder el idioma: "Mi padre siempre nos instó a hablar alemán juntos, incluso en Brasil", explica la Reina en su libro.
"A veces no fue fácil, requería mucha autodisciplina, no solo elegir la siguiente mejor palabra portuguesa y usarla", continúa contando la Reina. Además, su padre solía hacerles correcciones para que hablaran perfectamente ambos idiomas, algo que ha permitido que ahora la Reina Silvia tenga un gran alemán: "Mi padre solía corregirnos: 'Se llama el sofá'. Sofá es masculino en portugués".Lo aprendieron, pero no lo usan en público
Además de la técnica de la Reina, sus tres hijos siguieron formándose con tutores privados, y, aunque tienen conocimiento en el idioma, parece que los hijos de la Reina Silvia y el Rey Carlos Gustavo tienen preferencia por otros idiomas. Esto lo suelen demostrar cuando hablan con los medios alemanes, ya que, en lugar de utilizar el alemán, se comunican y responden en inglés con los mismos.