Hace dos años que vive retirado de la agenda pública y aunque su existencia de jubilado transcurre en una relativa tranquilidad a pesar de los achaques propios de la edad, el Duque de Edimburgo sigue fiel a sí mismo. Conocido por sus salidas de tono, la última noticia que protagoniza no dejará a nadie indiferente.
Tal y como publica The Times, el esposo de la Reina Isabel II se ha convertido en " la primera persona en Gran Bretaña que consigue una cosecha exitosa de trufas negras ". Sí, así es, el Príncipe Felipe se dedica ahora a la agricultura, una historia que viene de años atrás.
Según lo que cuenta el citado medio, en 2006 se le ocurrió la idea de plantar este tipo de hongos tan valorados en el mercado (pueden alcanzar los 1.000 euros) como una vía alternativa para mantener Sandringham House : la residencia privada de la Reina que su marido gestiona desde los años 50. Para ello plantó más de 300 brotes en los terrenos del palacio.
Una larga espera que ha merecido la pena
Ha tenido que esperar 12 años para poder recoger los frutos de su trabajo. Unos frutos, dicho sea de paso, muy exquisitos. Quien lo dice es Adrian Cole, experto en este tipo de cultivos y encargado de ayudar al duque a hacer la plantación: " La cosecha ha sido altamente exitosa. La mayoría son trufas de la clase P'erigord, de la mejor calidad alcanzable ". Eso sí, finalmente han decidido reservar el manjar para el disfrute de la Familia Real Británica y no ponerlo en venta.