Una adolescencia fuera de Japón
De manera que, el entonces Príncipe Naruhito se trasladó hasta la Universidad de Oxford, donde cursó sus estudios y donde conoció a la que luego sería su mujer, Masako de Japón. Sin embargo, esta no fue la única medida, sino que sus progenitores tomaron también la decisión de que por primera vez el Heredero creciera mano a mano con el resto de hermanos, así como con sus propios padres. Y es que, la tradición hasta el momento había sido que los hijos crecieran rodeados de duros profesores y severas normas.
La depresión de Masako de Japón
No obstante, parece que Masako de Japón no ha terminado de acostumbrarse y desde hace años tiene que lidiar con una depresión que apenas le ha permitido cumplir con su faceta profesional. Sin embargo, Naruhito ya declaró hace unos años que haría todo lo que fuera por cuidar a su mujer y por ella no ha dudado en salir al paso de ciertas declaraciones que cuestionaban su idoneidad como miembro de la Familia Imperial.
"Me esforzaré por dar lo mejor de mí para poder contribuir a la felicidad de los demás", afirmó la mujer del Emperador, que por fin a principios de 2019 se pronunciaba por primera vez sobre su enfermedad abiertamente: "Me gustaría continuar los esfuerzos para mejorar mi salud y dedicarme a tareas públicas tanto como pueda".
Ambos son padres de una niña llamada Aiko que, desafortunadamente, no podrá convertirse en la próxima Emperatriz de su país, puesto que el ascenso a dicho puesto solo está permitido para los miembros varones de la familia. Sin duda una complicada situación que tuvo mucho que ver en el malestar de la Emperatriz consorte, quien se sentía culpable por no haber dado a luz a un varón. No obstante, aceptada ya la situación, los siguientes en la línea de sucesión son el hermano del Emperador Naruhito y por ende, su sobrino.
Emperador por adelantado
De cualquier forma, por fin Akihito de Japón ha conseguido ver cumplido el que llevaba siendo su deseo desde hacía dos años: la abdicación. Son muchos los problemas de salud de los que se ha visto aquejado el hasta ahora Emperador y, finalmente, el Parlamento nipón aprobó la ley que ha permitido el traspaso de poderes al Príncipe Naruhito. Cabe recordar que la legislación del país no preveía en su normativa el traspaso de poderes y, de esta forma, Japón da un paso adelante en sus intenciones progresistas.
Lo cierto es que es la primera vez a lo largo de los más de 200 años de dinastía nipona que un líder dimite de su puesto, pero los continuos achaques de Akihito así lo demandaban. En los últimos tiempos se ha tenido que ausentar de numerosos actos oficiales, así como la pedida de Ayako de Takamado, hija de su primo Norihito, se vio alterada por el accidente cerebrovascular del que fue víctima. De manera que, esta nueva era, encabezada por el Emperador Naruhito, se denominará Reiwa, que significa "el nacimiento de una civilización donde los seres conviven en armonía", tal y como aclaró el Primer Ministro del país, Shinzo Abe.