El Duque de Sussex se ha adaptado perfectamente a la vida y costumbres no solo de California, sino de otras partes de Estados Unidos.
El Príncipe Harry y Meghan Markle abandonaron oficialmente la Casa Real Británica en marzo de 2020. Sin embargo, ya se habían marchado en noviembre de 2019 con su hijo Archie a Canadá. Lo que parecía ser una estancia de unas semanas se alargó meses, hasta que a principios de primavera de 2020 se mudaron a Estados Unidos, y más concretamente a California, donde encontraron un hogar ese mismo año al comprarse una mansión en Montecito, Santa Barbara. Your browser doesn’t support HTML5 video
En el rodeo
Además, parece que se ha adaptado muy bien a ciertas costumbres estadounidenses, o al menos eso deja ver con las dos salidas que ha realizado entre febrero y marzo de 2022, justo antes de que se cumplieran dos años de su salida de la Casa Real Británica. Primero fue el 13 de febrero de 2022, cuando viajó a Inglewood, California, para asistir a la Super Bowl, un espectáculo deportivo muy arraigado en Estados Unidos en el que sin embargo el deporte no es lo más importante. Allí le acompañó su prima, la Princesa Eugenia de York, que viajó con su marido y su hijo a Estados Unidos para visitar a los Sussex.
Tres semanas después, el Duque de Sussex volvió a mostrar lo integrado que está en Estados Unidos yendo a un espectáculo totalmente alejado a lo que está acostumbrado como británico. Cogió un vuelo hasta Texas para asistir al Stockyards Rodeo que tuvo lugar el sábado 5 de marzo de 2022 en el Cowtown Coliseum de Fort Worth, en el citado estado sureño.
Al más puro estilo cow boy, el Duque de Sussex se colocó un sombrero vaquero y disfrutó del rodeo, realizando un recorrido por el estadio, donde causó sensación ante los presentes, algunos de los cuales compartieron imágenes y comentarios en redes sociales señalando que era la primera vez que veían a un príncipe de verdad.