Ante la larga ausencia de Charlene de Mónaco por su enfermedad que le sobrevino en Sudáfrica, sus hijos han tomado más protagonismo.
La Princesa Charlene sigue ausente. La Princesa de Mónaco viajó a su país, Sudáfrica, para luchar contra la caza furtiva. Lo hizo mostrando al mundo su amor por la vida salvaje posando para el objetivo de Christian Sperka y participando en una polémica actividad para evitar la caza furtiva: cortar los cuernos a los rinocerontes. Esto provoca que no sean atractivos para los furtivos, pero puede provocar problemas a estos animales.
Su viaje tenía un principio y un fin, pero al ver que se alargaba, Palacio Grimaldi explicó que la Princesa Charlene había contraído una infección otorrinolaringológica durante este viaje a Sudáfrica y que por tanto se le desaconsejaba viajar. Por ello, y ante una ausencia tan prolongada, fueron Alberto de Mónaco y sus hijos, Jacques y Gabriella, los que volaron al continente africano, donde participaron en un safari y celebraron todos juntos el cumpleaños de Aiva Grace, hija de Sean Wittstock, hermano de Charlene de Mónaco.Eso se mostró a principios de junio de 2021, y el mes ha ido avanzando y no ha habido ni rastro de la Primera Dama, que se perdió una visita al Museo Oceanográfico de Mónaco y la celebración del Corpus, eventos en los que hubiera estado presente de encontrarse en el Principado. Igualmente no ha podido acudir al World Rugby Sevens Repechage, Torneo Clasificatorio Olímpico de Rugby que organizaron la Federación Mónaco de Rugby con el respaldo de la Federación Internacional de Rugby y la Fundación Princesa Charlene de Mónaco. Eso sí, su ausencia estuvo bien cubierta.
El Príncipe Alberto ha podido continuar con normalidad con su intensa agenda, y en eventos en los que le parecía oportuno, ha llevado a sus hijos. El Príncipe Jacques y la Princesa Gabriella están muy acostumbrados a dejarse ver en público desde bien pequeños y participan de vez en cuando en actos oficiales, por lo que están encantados cuando sus padres, o en este caso, solo su progenitor, les lleva a alguno.En esta ocasión, el Príncipe de Mónaco se desplazó al Estadio Louis II junto al Marqués de Baux y la Condesa de Carladès para ver un partido de rugby. En este acto, donde se divirtieron junto a sus primas, se dejaron ver sin mascarilla por primera vez en mucho tiempo, reflejo de la mejoría de la situación de la pandemia. Eso sí, el Príncipe Alberto sí la llevó.
Los niños se lo pasaron muy bien en el partido que vieron del World Rugby Sevens Repechage y les encantó la mascota del torneo, con la que posaron junto a sus primas Kaia Rose y Bodhi Wittstock, a las que están muy unidos. Por su parte, el Príncipe Alberto sacó su móvil y se encargó de hacer fotos a los niños, imágenes que además de tener como recuerdo, a buen seguro envió a la Princesa Charlene.