Volviendo a Países Bajos, la Princesa Alexia ha querido cumplir con una tradición que ya realizó su hermana Amalia dos años antes cuando se graduó Cum Laude en el Christelijk Gymnasium Sorghvliet. Aquel junio de 2021, la Princesa de Orange izó la bandera del Palacio Huis ten Bosch para celebrar haber terminado sus exámenes y que había obtenido su diploma. Ese izado sirvió para subir también una mochila, la que debió haber utilizado para ir al colegio.
Y mientras en el vídeo de la Princesa de Orange la cámara terminaba enfocando la bandera ondeando, en el caso de Alexia de Holanda el plano bajó nuevamente a la hija mediana del Rey de Países Bajos, que sonrió ampliamente mirando a cámara y movió el brazo en un gesto espontáneo que muestra evidentemente su carácter.
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Alexia de Holanda es simpática, abierta y espontánea, y además no cuenta con la presión de ser la heredera, por lo que se puede permitir ser más natural que su hermana Amalia, a la que se nota más contenida. Además, es toda una amante de la moda que prefirió izar un bolso, en el que quizás llevaría los apuntes, carpetas y bolis a clase, en lugar de aupar una mochila.
Finalizada su etapa escolar, se abre un mundo de posibilidades para Alexia de Holanda. Para empezar, señaló en su posado de verano con sus padres y hermanas que quería disfrutar de un año sabático en el que deseaba viajar, y trabajar antes de la universidad.
Asimismo, aunque dejó claro que estará ahí para apoyar a su hermana en su reinado, y se entiende que antes a su padre, desea seguir su propio camino y no dedicarse solo a servir a la Corona: "También tengo mis propias ambiciones que quiero perseguir", expresó Alexia de Holanda.
El Rey Guillermo Alejandro tuvo que volver a Holanda
Esta felicidad de la Princesa Alexia ha llegado en un momento turbulento para Países Bajos. El Rey tuvo que interrumpir sus vacaciones en el extranjero, previsiblemente en Grecia, donde tiene una propiedad, y regresó a Holanda. El 7 de julio de 2023, el Primer Ministro Mark Rutte presentó su dimisión al Jefe del Estado, además de la de todo el Gobierno de coalición debido a su desacuerdo en política migratoria. Al día siguiente, el Monarca recibió a Rutte como Primer Ministro saliente, en el Palacio Huis ten Bosch.