Los Príncipes Alberto y Charlene de Mónaco fueron los encargados de presidir una fiesta benéfica muy especial, pues los fondos conseguidos iban destinados a la fundación de la Princesa que intenta ayudar a Sudáfrica, su país natal.
Presumiendo de elegancia con un vestido largo de encaje y con una sonrisa de oreja a oreja, Charlene llegó de la mano del Príncipe Soberano, que también se mostró muy sonriente en una de las incontables galas que se celebran en el pequeño y rico país que rige.
Charlene de Mónaco, una apasionada de la moda en París
Entre los asistentes destacó la presencia del actor Roger Moore y su esposa, Kristina Tholstrup, así como también la modelo sueca Victoria Silvstedt, toda una habitual en los eventos monegascos que guarda muy buena relación con los Grimaldi, tanto que incluso fue invitada a la boda de Alberto y Charlene en julio de 2011, al igual que ocurrió con el actor que dio vida a James Bond.
La 'South Africa Night Gala', que es como se denominó la fiesta, estuvo amenizada por el cantante sudafricano Johnny Clegg, y también contó con la presencia de Gareth Wittstock, hermano de la Princesa Charlene, que también quiso participar en la gala.
Tras la fiesta Charlene no se quedó en palacio, pues volvió a desplazarse a París para disfrutar de unas de las aficiones con la que parece disfrutar más desde que se convirtió en Princesa de Mónaco, la moda, y es que la sudafricana asistió al desfile de Akris organizado con motivo de la presentación de la colección primavera/verano 2013, y más tarde a la cena celebrada en la capital gala.