¡Quién ha visto y quién ve a la Princesa Charlene de Mónaco! Su rostro denotaba tristeza, seriedad y poca alegría y comodidad en la mayor parte de las imágenes que se tomaban de ella desde que se casó con Alberto de Mónaco, incluso el día de su boda, el que tendría que haber sido uno de los más felices de su vida. Sin embargo, desde que dio a luz a los mellizos Jacques y Gabriella, todo ha cambiado.
Primero tuvieron lugar los festejos más solemnes, en los que participaron también las hermanas de Alberto de Mónaco, las Princesas Carolina y Princesa Estefanía, y sus respectivos hijos, además del nieto mayor de la Princesa de Hannover, Sasha Casiraghi, y los hijos de los Príncipes de Mónaco, Jacques y Gabriella. Destacó la presencia de Beatrice Borromeo, prometida de Pierre Casiraghi, que está a pocos días de ser una 'Grimaldi' más de forma oficial.
Robbie Williams reinó en Mónaco
El domingo llegó el plato fuerte y más divertido de la mano de Robbie Williams, que ofreció un concierto gratuito en la Plaza del Palacio que por supuesto fue presidido por los Príncipes de Mónaco. La pareja, que se mostró muy enamorada y cómplice, vistió de forma elegante pero casual para esta cita musical que puso a bailar a todo el pequeño país.
Antes del recital, Alberto y Charlene salieron al escenario para ofrecer unas palabras antes de dar paso al artista británico, que lo dio todo sobre el escenario como solo él sabe hacer. Además de eso tuvo tiempo para posar junto a la pareja principesca y su esposa, Ayda Field, que viajó también a Mónaco para la ocasión. Sin duda fue el final perfecto para un fin de semana redondo con el que Alberto II ha querido celebrar que hace 10 años que es el Príncipe de Mónaco. Dentro de otros 10 años podrá festejarlo con sus dos hijos, que ya serán mayores para participar en todos los actos.