David Boies tiene planeado lo que va a hacer y lo que nunca se le ocurriría cuando llegue el momento de interrogar al Duque de York.
Por mucho que el Príncipe Andrés niegue las acusaciones contra él o diga que carece de información suficiente para admitir o negar. Por mucho que su cara defensa legal trate una y otra vez de desmontar la demanda interpuesta contra él por Virginia Giuffre y por mucho que el Príncipe Carlos y el Príncipe Guillermo presionen al Duque de York para que llegue a un acuerdo con la mujer que le acusa de abusos sexuales, lo más probable es que termine habiendo juicio.
Todo cambió para el Príncipe Andrés cuando el juez Kaplan rechazó la petición de desestimación de la demanda civil que había presentado su defensa. La Casa Real Británica le expulsó definitivamente, se le retiraron los patrocinios, dejó de poder utilizar el tratamiento de Alteza Real y tiene que defenderse como ciudadano privado. Todo ello para evitar que este escándalo salpique a la Monarquía, sobre todo en el año en el que se celebra el 70 aniversario de reinado de la Reina Isabel, su Jubileo de Platino.La posibilidad de llegar a un acuerdo no está del todo cerrada, pero si bien el Duque de York podría ofrecer entre 5 y 10 millones a Virginia Giuffre, el principal escollo es la no admisión de culpa. La presunta víctima quiere una reparación y no desea mandar el mensaje de que los ricos y poderosos pueden salir libres de situaciones delictivas haciendo uso de su fortuna e influencia.
Y luego están las palabras del abogado de Virginia Giuffre, David Boies, que insiste en la posibilidad de llegar a un acuerdo, pero no solo eso. El letrado ha señalado que es consciente de que el Duque de York va a vivir momentos incómodos cuando se produzca su interrogatorio. Para ello volará a Reino Unido y realizará preguntas al acusado durante uno o dos días. "Voy a tratar de hacerle entender que no va a ser un combate, pero obviamente le voy a hacer muchas preguntas. Y aunque algunas de ellas pueden ser incómodas, no voy a ser agresivo ni ofensivo de ninguna manera con él. Voy a ser respetuoso", aseguró Boies a The Telegraph. Esos planes incluyen ya líneas que el abogado no quiere traspasar, pero hay más. Ha reconocido que si van a juicio no va a hacer testificar ni a Sarah Ferguson ni a sus hijas, la Princesa Beatriz y la Princesa Eugenia de York, quienes sin duda ven como un alivio no tener que pasar por eso. Lamenta el dolor causado a la Reina Isabel
Tampoco considera utilizar conversaciones entre la Reina Isabel y su hijo. Sobre la Monarca lamentó que todo este asunto se produjera en el año del Jubileo de Platino y que todo fuera tan público, describiendo lo que está pasando como "la peor pesadilla de una madre".
El abogado ha señalado además que no entiende la estrategia del Duque de York de negar absolutamente todo o decir que no puede negar o admitir porque no tiene información suficiente. Boies señala que hubiera sido mejor para él decir que no sabía que la presunta víctima era menor de edad o haber alegado que sus relaciones fueron consentidas. Esto además entorpecería el acuerdo, ya que tanto Giuffre como su abogado entienden que no se puede alcanzar algo así con una persona que no admite ni siquiera haber conocido a la presunta víctima.